Cerrar

Tres individuos, con acento eslavo, cometieron el robo a última hora de la mañana

Desvalijan una joyería de Trobajo tras amordazar y encerrar al propietario

Uno de los atracadores entró en el establecimiento con la excusa de realizar unas compras

Publicado por
Luis Urdiales - león
León

Creado:

Actualizado:

El atraco a la joyería Fernández Olite, en la calle Párroco Pablo Díez de Trobajo del Camino, se produjo instantes antes del horario de cierre del establecimiento, en torno a las 14 horas. En ese momento, un individuo descrito a las fuerzas policiales como un tipo alto, con el pelo rubio y bien vestido, entró en el local y le solicitó al propietario y dependiente que le mostrara un determinado producto. Ahí acabó la relación comercial; en un descuido del propietario, el inquilino que simulaba ser con cliente con intención de adquirir algún género de joyería abrió la puerta del establecimiento para que entrara un segundo individuo. Entre ambos redujeron al joyero, al que amenazaron antes de amordazarle y atarle de pies y manos con cinta adhesiva y reducirle en el interior de la caja fuerte. Entonces ya operaba en el interior de la joyería un tercer sujeto. Reducido y encerrado el propietario, los atracadores que se expresaban con acento eslavo desvalijaron la estancia sin ninguna urgencia. Abandonaron el local a una hora indeterminada. No sonó una alarma; ni se levantó una sola sospecha entre los vecinos de esta zona de Trobajo, que registra mucho tránsito peatonal a la hora en la que se produjo el suceso. El rescate del regente de la joyería atracada fue posible después de que su familia, alertada ante el retraso de su regreso a la hora de la comida, decidió acercarse al establecimiento. Según informó el presidente de la Asociación de Joyeros de León y de la federación autonómica, Jesús Prieto Olite, el dueño del establecimiento atracado no sufrió heridas más allá de magulladuras derivadas de su resistencia ante el forcejeo que emplearon los atracadores para reducirle. Poco antes de las cuatro de la tarde, el número 246 de la calle Párroco Pablo Díez era un hervidero de coches de policía y guardia civil que iniciaron la investigación del hecho tras comprobar que no se habían registrado daños personales. Anoche, los dueños de la joyería trataban de aproximar los cálculos a la cantidad de productos robados en el atraco, al que se podía sumar una gran cantidad de dinero que también se pudieron llevar los atracadores. Los agentes de la Guardia Civil trabajaron a lo largo de la tarde en el interior de la tienda recogiendo huellas para investigar la autoría.