La Junta no soluciona desde el 2001 los vertidos al río de 2.000 vecinos

El proyecto que presentó el Ayuntamiento de Sariegos en el 2001 para la construcción de un colector, que pueda recoger los vertidos de Carbajal, el Alisar de Azadinos y la carretera de Caboalles, duerme desde hace tres años en algún cajón de la Junta. El Ejecutivo autonómico ha hecho hasta ahora oídos sordos a las continuas peticiones de «urgente necesidad» de Sariegos para resolver el problema de contaminación del río Bernesga a su paso por el municipio, que podría evitarse con la puesta en marcha de esa infraestructura. De hecho, los 2.000 vecinos que residen en las urbanizaciones de ambas poblaciones siguen vertiendo sus aguas sucias al río por la falta del colector. Según la memoria valorada que encargó el Ayuntamiento de Sariegos hace tres años a los ingenieros Ángel Mancebo y Guillermo de Cabo, la depuración de las aguas residuales de Carbajal y parte de Azadinos costaría 360.000 euros y sería necesario que las conducciones atravesaran la carretera C-623 y la línea del ferrocarril que une León y Asturias para enganchar a la red de saneamiento del resto del municipio y de ésta a la estación depuradora de León y su alfoz. En el documento se explica que las urbanizaciones de Monteleón, El Montico, El Soto, El Hayedo, Los Acebos, Los Sauces, Los Girasoles, El Robledal y los Llatales de Carbajal, junto con los barrios del Alisar y Caboalles de Azadinos, «disponen de una red de saneamiento unitaria con vertido directo al río Bernesga y, aunque aún existen restos de las antiguas fosas sépticas, hoy fuera de servicio, tendrían una capacidad irrisoria para atender las necesidades de la población actual». El aumento de población Para solucionar el déficit depurativo que generó el aumento de población en el municipio de Sariegos, los ingenieros proponían que se habilitara un emisario de aguas negras, que cruzara el lecho del Bernesga en las proximidades de la gravera, donde la cota es más alta, para enlazar con el emisario del resto del Ayuntamiento de Sariegos, tras salvar las vías de Renfe. El alcalde, el leonesista Ismael Lorenzana, recuerda que «cuando el Partido Socialista estaba en la oposición en el Ayuntamiento de León, decía que quien contamina, paga». Por eso se pregunta, en este caso, «¿de quién es la responsabilidad, de Sariegos, que llevamos luchando tres años para que hagan el colector; de la Junta, que nos ha dado buenas palabras y dice que el tema va por buen camino, o de León, que todavía no nos ha dejado engancharnos a la estación depuradora que construyeron hace casi cuatro años y que se supone que era para solucionar los vertidos de la ciudad y el alfoz?», denuncia.