Diario de León

Correos reconoce «pequeños desajustes» y los sindicatos critican la movilidad de 10.000 empleados

El traslado de 174 carteros provoca el «caos» en León y parte del alfoz

Los usuarios denuncian retrasos superiores a los diez días en el reparto de la correspondencia

Varios funcionarios trabajan en las oficinas centrales de Correos en la capital leonesa

Varios funcionarios trabajan en las oficinas centrales de Correos en la capital leonesa

León

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¿Hoy tampoco hay cartas? Durante días los buzones de ciertos barrios de la capital y de las localidades del alfoz han permanecido vacíos. Decenas de ciudadanos han expresado sus quejas de forma verbal e, incluso, por escrito. El traslado de 174 carteros leoneses ha provocado el «caos» en la oficina de Correos de la capital y el «pánico» o la «indignación» entre algunos afectados. Facturas, recibos y multas que llegaron tarde y que los usuarios tendrán que pagar con recargo o, como en el caso de un vecino de Villaquilambre, una comunicación del Inem para una oferta de empleo a la que no llegó a tiempo, son algunas de las quejas recibidas en este periódico. Pero la empresa pública resta importancia a la movilidad de 10.000 empleados en toda España, incluidos los leoneses, y sólo reconoce «pequeños desajustes». Los sindicatos, en cambio, no niegan el «lío» provocado por las vacantes de 174 carteros veteranos, destinados a otras provincias, y la posterior llegada de sustitutos procedentes en su mayoría de listas de contratación; en definitiva, personal poco familiarizado con el servicio de reparto o que desconoce el callejero de la ciudad. El traslado de los carteros de unas provincias a otras es consecuencia de una sentencia de la Audiencia Nacional, dictada a primeros de año, que obligaba a Correos a convertir en fijos a los empleados que mantengan contratos de interinidad por vacante por un tiempo superior a tres meses. En León había personal eventual con dieciséis años de servicio. Correos es una de las empresas con mayor número de trabajadores de España, con una plantilla de 63.186 empleados, de los que 41.253 son funcionarios y los 21.933 restantes personal laboral, según datos de la empresa del 2002, los últimos disponibles. La reorganización de la plantilla ha dejado en suspenso el reparto durante días en algunas calles de la capital y en localidades como Trobajo, San Andrés, Onzonilla, Villaquilambre o Navatejera. En el municipio de Sariegos el problema se ha visto agravado por la jubilación de la cartera. Algunos sindicatos, como el CSIF, no están de acuerdo con la política de recolocación que está llevando a cabo la empresa. Aseguran que, mientras los carteros de León han sido destinados a otras ciudades, aquí han tenido que recurrir a los de provincias limítrofes para salvar el «escollo». 25 millones de cartas al día La dirección, en cambio, considera que el proceso de traslados está prácticamente concluido -ya se ha asignado plaza a 8.000 de los 10.000 empleados afectados- y «la distribución se ha normalizado». Según fuentes de la dirección de Correos, «hacer fijas a tantas personas va a redundar en una mayor calidad». Aportan el dato de 25 millones de envíos diarios y que el 80% de la correspondencia se reparte en un plazo de veinticuatro horas. Admiten que el crecimiento de las poblaciones de la periferia de León ha provocado cierto «desfase» en el servicio de cartería. «Lo estamos estudiando, porque nos adelantamos a los problemas», explican.

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