Educación suprime para el próximo año 29 unidades escolares y 38 empleos
Los responsables del Sindicato de Trabajadores de Enseñanza de León (Stele) pusieron ayer las notas de fin de curso a la administración educativa, una evaluación en la que la Consejería de Educación de la Junta quedó muy lejos del aprobado, según el sindicato mayoritario en el sector. Pedro Cimadevilla, del comité de Stele puso de manifiesto que León encabeza un año más la lista de las provincias de la comunidad peor paradas en los arreglos escolares, ya que pierde 29 unidades escolares -el 87% de ellas en el medio rural- frente a las 12 que se crean, mientras que en el conjunto de la autonomía se produce una reducción neta de 28 unidades. María Teresa Pérez, representante de Stele en el Consejo Escolar de Castilla y León, advierte además que a este ajuste de unidades escolares habrá que sumar las clausuras que la Junta lleva a cabo al finalizar cada curso -el año pasado fueron 46 unidades- y que pese a que se plantean como provisionales siempre acaban por confirmarse. «Aunque te dicen que se volverán a crear si al año siguiente hay más niños, la realidad es que esto nunca ocurre, porque cuando se cierra una unidad, muchos padres optan por llevarse a los niños a otro centro, con lo que la situación siempre empeora», explica. Pérdida de empleo en el sector En cuanto a las implicaciones para el empleo, estos ajustes suponen la supresión de 38 puestos de docentes frente a los 29 que se crean. Los responsables de Stele señalan además que se produce un deterioro de la calidad del empleo, dado que 35 de los 38 puestos que desaparecen son ordinarios, mientras que la mitad de los nuevos corresponden a pedagogía terapéutica, audición y lenguaje, todos ellos de carácter itinerante. El sindicato cita como ejemplos de la implicación de estos cambios para la calidad del empleo y de la enseñanza el hecho de que la Junta atenderá con tres nuevos profesores de pedagogía terapéutica las necesidades de siete centros, o que los nueve nuevos profesores de audición y lenguaje deberán atender diez colegios. Este sindicato también denuncia que el profesorado de Castilla y León cada vez se ve más alejado en salarios del de otras autonomías, ya que sus retribuciones variables -que estipula cada comunidad- están entre las más bajas del país. Finalmente Stele acusa a la Junta de haber vaciado de contenidos y capacidad de negociación a la Dirección Provincial de Educación, que según aseguran no puede tomar decisiones y para todo remiten a la Consejería de Educación en Valladolid.