Una feria con mucho gusto

Aunque se notaba la resaca de la noche de San Juan, algunos leoneses y turistas que pasan estos días por la capital, se animaron en la mañana de ayer a hacer un recorrido por el Barrio Húmedo y probar las tapas de la feria que este año se desarrolla, por primera vez, en los bares y restaurantes en lugar de en las tradicionales carpas del paseo de Papalaguinda. El Ayuntamiento lo consideró así debido a la preocupación que despertaba la salud de cuantos pasaban por allí, pues los puestos no reunían las condiciones sanitarias e higiénicas que se requieren para estos casos. Esta feria, inaugurada el pasado día 19, se prolongará hasta el mismo día de San Pedro y en ella se dan cita gente de todas las edades que, aunque ya acostumbradas a las tradicionales tapas leonesas, quieren probar algo diferente y más elaborado de los que se suele ofrecer normalmente. Sin embargo, ayer se podía ver a muchos despistados -o desganados- que, lejos de probar lo novedoso, tomaban los pinchos de siempre. Según los dueños de algunos de los setenta establecimientos que participan en este evento, si se nota una mayor afluencia de gente durante estos días, lo que atribuyen mayormente a la celebración de las fiestas de San Juan, y no a la feria de la tapa. Esta feria se basa en la idea de que los hosteleros compitan por realizar el mejor producto gastronómico en forma de tapa, lo que ofrecen en sus propios locales para más comodidad. Todos los bares que participan en este original concurso ofrecen la tapa de la feria -aunque si se quiere probarla hay que pedirla específicamente- y bebida al precio único de 1.50 euros, si bien hay muchos que se conforman simplemente con tomar un refresco y dar un paseo por el casco antiguo. El establecimiento del precio único en todos los bares participantes pone fin a la polémica que suscitada en años anteriores porque fueron muchos los ciudadanos que se quejaron de los precios abusivos que se pedían en las carpas. Desde el Ayuntamiento de León se han establecido tres categorías en el concurso de la feria de la tapa, en el que además de bares del húmedo, participan establecimientos de otras zonas de la capital como Eras de Renueva, el casco histórico, barrio romántico, las zonas del Crucero, La Chantría y San Mamés, además de el denominado casco moderno y Santa Ana, con lo que los leoneses ya no tiene excusa para no asistir. Estas tres modalidades son la de la tapa leonesa como tal - que tendrá que ser elaborada con productos de la tierra-, la moderna y la dulce. Los mejores pinchos serán elegidos, además de por el propio público, por un jurado especializado. Para saber si el establecimiento en el que vamos a entrar participa en la feria de la tapa, debemos fijarnos si en él está el cartel de las fiestas que anuncia el concurso y en el que aparecen tres palillos dibujados, cada uno de los cuales se corresponde con un tipo de tapa diferente (tradicional, moderna o dulce). En el mismo cartel, suele aparecer la tapa que ofrece el bar o restaurante en cuestión y que van desde las tradicionales mollejas guisadas o los caracoles, a los más elaborados como el carpaccio de cecina o los pimientos del fresno con anchoas y queso de valdeón. Según afirmó recientemente la concejala de Turismo y Fiestas del Ayuntamiento de León, Susana Travesí, en función del éxito que se consiga en esta edición de la feria de la tapa, se pensará si poner en marcha o no una nueva convocatoria durante otras fiestas de la ciudad, como podría ser San Froilán.