El Congreso aprueba que la variante de Pajares se construya sin retrasos

Después del revés que originó la pasada primavera la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, al anunciar la paralización de las obras de tres tramos de la variante de Pajares, el Congreso ha dado un nuevo giro al futuro de una de las infraestructuras más reivindicadas por León y Asturias. Los grupos parlamentarios del PSOE, PP e IU lograron ponerse de acuerdo el pasado miércoles para consensuar una iniciativa en defensa de la variante de Pajares. En ella exigen que la obra se construya en los plazos previstos -2010-, sin ningún retraso, y con la consignación presupuestaria aprobada por el anterior Gobierno popular -1.858 millones-. El texto aprobado por el Congreso de los Diputados deja las manos libres al Ejecutivo de Rodríguez Zapatero para que lleve a cabo la licitación de los tres tramos suspendidos por la ministra. Son los comprendidos entre La Robla, el inicio del túnel que atraviesa la Cordillera Cantábrica y la localidad asturiana de Pola de Lena. Las presuntas irregularidades Álvarez había paralizado la adjudicación de esos casi 25 kilómetros por presuntas irregularidades en el proceso de contratación y dudas en la financiación económica. Es más, se quejó de la falta de un proyecto o diseño del PP sobre el desarrollo del resto de la red que traerá la alta velocidad a la provincia. También manifestó que uno de los errores eran los accesos a los túneles, preparados sólo para velocidades de 250 kilómetros a la hora, frente a los 300 kilómetros por hora a los que podrían circular los trenes en el interior. La variante de Pajares es la obra de ingeniería civil más compleja del nuevo plan de infraestructuras de España y, según la Asociación Leonesa de Amigos del Ferrocarril, el único paso de características alpinas construido en Europa para acceder a una región y no a otro país, como ocurre con los túneles abiertos entre Suiza e Italia. Perforar la Cordillera En el área conocida como La Gretusa, donde ya se han expropiado todas las fincas, comenzará a excavarse la montaña por métodos convencionales debido a la complejidad del terreno. De las montañas se extraerán dos millones de metros cúbicos de roca (4.400 millones de kilos) para abrir el paso de los dos túneles que unirán el Principado y la Meseta por el macizo de Pajares. La sofisticada maquinaria empleada en los trabajos, utilizadas también para abrir los 28 kilómetros del AVE en la Sierra de Guadarrama, tardan más de medio año en ser montadas. Tienen una longitud de más de cien metros y son utilizadas por 70 hombres que trabajarán durante las 24 horas del día en los próximos cinco años. La construcción de la variante ferroviaria ya ha generado los primeros puestos de trabajo en la comarca de Gordón. Diez personas trabajan desde abril para la planificación y de preparación de las obras.