Alerta policial por el robo a punta de pistola en una joyería del centro

«Nos apuntaron con metralletas. Nos pegaron, nos tiraron al suelo y nos dijeron que estuviéramos quietas o nos mataban». Es el relato de una de las dos dependientas de la Joyería Perodri horas después de haber sufrido un atraco. No puede contar más. Rompe a llorar por la conmoción. Todo ocurrió a las cinco de la tarde, aunque, al parecer, no hubo testigos presenciales. La céntrica joyería, ubicada en la calle Ordoño II, acababa de abrir sus puertas. Primero entro en un hombre. Echó un vistazo y, a continuación, irrumpieron otros dos. Iban a cara descubierta y, según la descripción de la Policía, tenían aspecto sudamericano y edades comprendidas entre los 30 y 40 años. Con pistolas y hachas Tras amenazar con pistolas a las empleadas y golpearlas -la Policía descarta que portaran metralletas- rompieron con hachas y palos la mayoría de las vitrinas del establecimiento y huyeron con el valioso botín -joyas y relojes de diseño y de primeras marcas-. Ni los propietarios de la joyería ni la Policía han evaluado aún los daños ni la cuantía del robo. A los pocos minutos del atraco, agentes de la Policía Nacional, Policía Local y Guardia Civil activaban un dispositivo de búsqueda de los tres peligrosos delincuentes, que, supuestamente, abandonaron el lugar del atraco en dos motocicletas de gran cilindrada y huyeron en dirección a la plaza de Santo Domingo. Según fuentes policiales, todo hace indicar que se trata se profesionales y que no eligieron la joyería al azar, sino que tenían perfectamente estudiado el asalto, la hora de perpetrarlo y la forma de huir. Patrullas de la Policía y la Guardia Civil establecieron controles en todas las salidas de la ciudad para localizar a los ocupantes de las motocicletas, así como en los accesos a las provincias de Valladolid y Zamora.