León mantiene la alerta de tormentas tras una noche de rayos y granizo

Protección Civil mantiene la alerta. El Instituto Nacional de Metereología prevé nuevas tormentas, ocasionalmente fuertes, en la provincia de León. En la madrugada del miércoles, entre las dos y las cuatro, el cielo descargó más de 1.500 rayos sobre la provincia y un pedrisco del «tamaño de aceitunas», como lo describe un agricultor de Sahagún. Los rayos fueron la causa de dos incendios en Truchas y Brazuelo, que ya están controlados. De momento, no hay una evaluación de daños, pero el presidente provincial de Asaja, José Antonio Turrado, explica que los cultivos de huerta, los frutales y los cereales de invierno -trigo, cebada y centeno- pueden ser los más afectados, así como la alubia. «El maíz y la remolacha tienen más capacidad de regeneración», añade. Según Turrado, aunque el granizo es siempre un fenómeno que provoca la alarma en el campo, su incidencia suele ser puntal. Las zonas más afectadas son las del sur de la provincia, especialmente las localidades de Sahagún, Toral de los Guzmanes, Matadeón de los Oteros y Matallana de Valmadrigal. En España, Guadalajara ha sido la más perjudicada por la fuerte granizada; hasta tal punto, que los alcaldes de las comarcas de la Campiña y el Corredor del Henares pedirán la declaración de «zona catastrófica», tras estimar que los daños en la agricultura superan los 17 millones de euros. León continuará en alerta en las próximas horas, en que se esperan nuevas tormentas, que dejarán hasta quince litros por metro cuadrado en una hora, acompañadas de granizo y fuertes vientos. Durante el fin de semana los termómetros recuperarán las temperaturas propias del verano, pero sin llegar a los máximos de días pasados.