«¿Qué vamos a hacer ahora»?
Los agricultores leoneses dedicados a la remolacha consideran que la reforma del sector les llevará a la ruina después de invertir mucho tiempo y dinero en sus cultivos
La respuesta de los agricultores leoneses a la reforma del sector remolachero planteada desde Bruselas no se ha hecho esperar. Todos manifiestan su descontento ante lo que consideran la ruina del cultivo de regadío más rentable de la provincia. Camino Cantón, una joven agricultora de San Martín del Camino, afirma que «esta reforma nos va a llevar a la ruina, porque no vamos a sacar beneficios, así que dejaremos de cultivar». A sus 31 años, y con más de 90.000 euros invertidos entre la nave para el cultivo la maquinaria, ve el futuro muy incierto. «Era lo único con lo que se vivía en el campo y ahora no sé como vamos a subsistir», asegura. Toda una vida Miguel Martínez, otro agricultor leonés dedicado al cultivo de la remolacha en su terreno de once hectáreas en Villar de Mazarife, opina que «si el Gobierno no para esto de alguna manera, tendré que dejar mi trabajo, al que he dedicado toda una vida». Asegura que, además, el futuro lo ve negro y que la reforma perjudicaría también a su hijo, que pensaba dedicarse al campo y al sector azucarero. «El Gobierno tiene que darnos otra alternativa si se deja de producir remolacha, porque esto está muy mal», puntualiza este hombre de 59 años. «He invertido mucho dinero» Más de 120.000 euros es lo que ha invertido Apolinar en la remolacha. A sus 47 años, explica que «no pensaba que fuese para tanto, ahora me siento impotente y desesperado. ¿Dónde voy a ir ahora?, se te baja la moral a los pies», asegura este hombre de San Martín del Camino, quien añade que todo esto le ha pillado de sopetón y que ve abocado a la desaparición al sector azucarero. Tiene una hija que no se quiere dedicar al campo. ¿Quién va a querer dedicarse a esto con las expectativas que tenemos?, se pregunta una y otra vez mientras señala que se ha avanzado mucho en los últimos años en cuanto a este tipo de cultivo y que se ha invertido mucho dinero en él, «sobre todo en regadío». El maíz, otra alternativa En Villar de Mazarife tiene Lorenzo sus 5 hectáreas en las que cultiva remolacha desde hace muchos años. «Esto es una ruina, porque no se podrá seguir produciendo, ya que son más los gastos que los ingresos», piensa este hombre de 43 años. Afirma con rotundidad que el gobierno «tiene que meter baza en esto porque si no va a ser la ruina de muchas familias». «Si esto sigue adelante, me dedicaré al maíz y un poco al trigo, aunque con ello no se vive». «Ahora a ver quién se va a hacer cargo de toda la inversión que hemos realizado», señala Lorenzo. Futuro incierto Guillermo Ruiz y su socio ganan con la remolacha unos 4.800 euros por cada cien kilos. Con la reforma perderían cerca de 1.500 euros por hectárea, «y eso en el caso de que tuviéramos una buena producción». «¿Cual es nuestro futuro?», se preguntan ambos.