La reforma del sector remolachero obligaría a cerrar a las azucareras, incluida la que queda en León

La reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del azúcar, propuesta por la Comisión Europea (CE), acabará en España con las once fábricas de transformación de la remolacha y con casi 30.000 empleos, entre agricultores y trabajadores de la industria, según denuncia el sector. De esos 30.000 empleos, unos 5.000 se perderían en Castilla y León, según fuentes del sector azucarero. En León supondría el cierre de la última factoría, ubicada en La Bañeza, después de que en los últimos años se clausuraran las de León y Veguellina de Órbigo. Bruselas propone reducir en 2,8 millones de toneladas la cuota comunitaria de producción de azúcar y fuertes recortes en los precios de referencia y en los que perciben los remolacheros (el 37 por ciento menos), en varias fases comprendidas entre 2005 y 2008. Para compensar el 60 por ciento de la merma de los ingresos que supondría esta reforma para los agricultores, la CE plantea conceder una ayuda desligada de la obligación de producir. Estas once fábricas dan empleo, según los sindicatos, a más de 9.500 trabajadores, directos e indirectos, que también se verían afectados por la reforma; de estos puestos de trabajo que se perderían, 5.000 serían de Castilla y León. El cultivo de remolacha ocupa en España entre 100.000 y 110.000 hectáreas al año, de las que un 55 por ciento se sitúan en la zona norte (Castilla y León, principalmente, además de Alava y la Rioja) y otro 40 por ciento están en la zona sur (Andalucía y Extremadura), mientras que el cinco por ciento restante se ubican en Albacete, Ciudad Real y Toledo. Los productores, unos 20.000 en todo el país, insisten en que esto supondrá el abandono del cultivo.