El Procurador del Común pide a la Junta que regule unas condiciones mínimas en todas las viviendas
El Procurador del Común de Castilla y León se ha dirigido a la Consejería de Fomento para que proceda a la regulación de las condiciones mínimas de salubridad y habitabilidad que debe reunir toda vivienda en Castilla y León. Entre las mismas se incluye un diseño y altura de las barandillas y antepechos en viviendas adecuado para la protección de la seguridad de las personas, especialmente a los niños. A juicio del Procurador del Común, la configuración de elementos de protección tales como barandillas y antepechos, debe integrar el contenido de los requisitos mínimos de toda vivienda. Las consecuencias que para la seguridad de las personas puede tener un deficiente diseño de estos elementos llegan, en ocasiones, a ser dramáticas, causando accidentes que afectan sobre todo a los más pequeños. Ya en el 2002, la institución se dirigió a los ayuntamientos de la comunidad con una población superior a 5.000 habitantes para que incluyeran unas determinadas condiciones de diseño y altura de los elementos de protección. Ahora se considera que esto debe formar parte de una norma autonómica que determine un nivel mínimo de calidad de todas las viviendas.