«Tengo confianza en los tres compañeros del equipo de gobierno que son de UPL»

L leva un mes de sobresaltos. Con la escisión de la UPL ha perdido la mayoría en un Ayuntamiento donde la oposición (el PP) es el grupo más poderoso numéricamente: 12 concejales frente a los 10 del PSOE, 3 de la UPL y 2 no adscritos. Pero está tranquilo. Las grandes inversiones anunciadas por Zapatero en el Consejo de Ministros del día 23 le han dado alas. Francisco Fernández habla de un León del siglo XXI que puede ser realidad en sólo cuatro años. -¿Cómo se ha tomado todos los cambios que ha habido este mes en el Ayuntamiento, provocados por la escisión de la UPL, que le han dejado en minoría? ­-Lo tomo como algo «normal». La política tiene este tipo de sobresaltos. Sigo manteniendo que mi objetivo como alcalde es sacar adelante los proyectos de esta ciudad y darle futuro. Cuando entramos nuestra prioridad era crear puestos de trabajo, tener vivienda accesible, participación de los ciudadanos en el Ayuntamiento... creo que todo esto lo vamos consiguiendo con un apoyo sólido desde el Gobierno central y con el respaldo, en algunos casos, de la Junta. -Pero la gobernabilidad en el Ayuntamiento no está asegurada. Además, De Francisco ha anunciado que no pisará el Ayuntamiento en tres años si no le restituyen sus derechos... ¿Cómo va a resistir los próximos tres años? -Lo importante es que los proyectos salgan. En el último Pleno hemos demostrado que a través del diálogo, del consenso, se pueden sacar todos los temas; no quedó ninguno de los importantes sobre la mesa y fueron apoyados por mayoría. No sólo es una cuestión de número, sino de un talante de sacar adelante los temas que interesan a la ciudad. -Amilivia ha afirmado que, al ser su partido el más votado, tiene derecho a gobernar... ­-Cualquier concejal o concejala puede tener una aspiración legítima a ocupar la Alcaldía. Hay una cosa muy clara, el proyecto de ciudad lo hemos iniciado nosotros este mandato, creo que los ciudadanos perciben que es serio, que tiene muchos apoyos y grandes posibilidades y, por lo tanto, el deber de cualquier político en este momento es apoyarlo. Ante la situación que tiene León, con las grandes decisiones que se han tomado... espero que todos estemos a la altura; si alguien no lo está, será su responsabilidad. -Tras los compromisos de Zapatero en León, cualquiera que planee echarles de la Acaldía debería pensarlo bien... aunque Amilivia dice que los compromisos de Zapatero son con la ciudad y no con el Ayuntamiento. ­-Sí, los compromisos son con la ciudad y con la ciudadanía. Sabemos que cuando alguien está en una posición de entendimiento, con una vinculación hasta personal -como yo tengo con el presidente-, siempre facilita las cosas, independientemente de los partidos y de los poderes... Nadie debe de presumir porque haya iniciado o haya colaborado... Es un tema de todos. Lo más importante que ha hecho este equipo de gobierno es que ha implicado a los ciudadanos de León en el proyecto, y eso se nota en la ciudad. -Herrera no quiso hacer declaraciones tras el Consejo de Ministros, tal vez por si recibía las críticas de su partido. Sin embargo, parece en sintonía con Zapatero y también con usted, con quien se reunió esta semana para agilizar algunos proyectos... ­-Percibí buena disposición y voluntad de colaboración. Creo que fue un ejemplo de cómo se puede colaborar entre distintas administraciones. Hay una buena sintonía entre el presidente del Gobierno y el presidente de la Junta y esa sintonía se traslada también a esta Alcaldía. Creo que entre los tres vamos a hacer posibles los proyectos que León necesita y en un corto plazo de tiempo. -Sin embargo, Herrera parece estar en el centro de todas las «conspiraciones» para echarle de la Alcaldía... -Un político del siglo XXI tiene que ser valorado por la ciudadanía por su gestión. Los políticos que se dediquen a la conspiración van a quedar fuera de juego. Si alguien está haciendo ese papel, sea quien sea, creo que se equivoca y eso le pasará factura. ­-¿Qué opina de la estrategia de De Francisco? -Hay que reconocerle que es una persona amante de León, no cabe la menor duda. Creo que tiene aciertos y equivocaciones, como cualquiera. Ante esta nueva situación en la que se encuentra, es un período de reflexión personal y política, que yo respeto. No voy a valorar sus decisiones o su comportamiento. -Pero su ausencia le afecta a usted directamente... -Espero que vuelva y que siga implicado y colaborando con el proyecto de León.