A pesar de algún llanto, comienzo con normalidad en la provincia

El comienzo del curso escolar 2004-2005 también transcurrió sin incidentes en varios puntos de la provincia. La jornada empezó para muchos con un buen madrugón, desayuno extra rápido y al cole con la mochila a la espalda para quizás echar un par de lágrimas cuando mamá dice adiós. Así ocurrió, por ejemplo, en el colegio de Almanza, en el que hubo algún rezagado que no quería separarse de sus padres. También en el colegio Nuestra Señora del Carmen de La Bañeza hubo algunos lloros, "A algunos les ha costado un poco", comentaba una profesora del centro que educa a los niños de tres años, quién añadió que «hay varios pequeños que se enfrentan por primera vez a la aventura escolar, y en cuanto los padres los han dejado en las aulas han tenido que adaptarse a la nueva experiencia de la enseñanza». Este ritual de la vuelta al cole supone una larga romería de compras durante el mes de septiembre para adquirir no sólo el material escolar obligatorio sino también lo último en mochilas, lapiceros, estuches o carpetas para que los niños acepten un nuevo curso con más alegría y olvidarse así de la morriña del verano. A pesar de los nervios y la timidez típicos del primer día, la mañana transcurrió muy tranquila entre juegos, canciones y el relato de lo que habían hecho los pequeños durante sus vacaciones. A pesar de las zonas rurales son las grandes perjudicadas cada año por el descenso de alumnos, algunos colegios de la provincia han visto aumentados sus escolares en las aulas gracias a la asistencia de inmigrantes.