El CTR recibirá el lunes las primeras 200 toneladas de basura para pruebas

Los primeros camiones con basura llegarán el lunes al CTR en San Román de la Vega, diez días después de su inauguración oficial. Durante esta jornada la planta recibirá alrededor de 200 toneladas de residuos para comenzar el proceso de pruebas de todo la línea de tratamiento. Fuentes de Gersul indicaron ayer que el complejo precisa de 8.000 toneladas para completar este periodo inicial de funcionamiento, por lo que a una media entre 200 y 300 toneladas diarias tardará algo más de un mes en completarse la llegada de todos los desechos necesarios. De todas formas desde el consorcio provincial se insiste en que no será hasta finales de año cuando el CTR esté operativo plenamente para hacerse cargo de las aproximadamente 200.000 toneladas anuales de basura que genera la provincia. Los residuos que el lunes llegarán hasta San Román de la Vega procederán sobre todo de la capital y su alfoz, precisamente las zonas donde existe un mayor problema con los desechos que generan más de 200.000 personas, ya que desde hace años llevan acumulándose en fardos en lugares como Trobajo del Cerecedo, Ferral del Bernesga y Valdefuentes del Páramo. A pesar de que la ciudad y su área metropolitana soportan la mayor generación de basura y por tanto la precariedad de este sistema, no hay que olvidar que existen otros muchos puntos de la provincia cuyos residuos corren la misma suerte, aproximadamente un 40% de los núcleos. Gersul sigue negociando un destino distinto al CTR para las balas de basura ya acumuladas durante estos años: 300.000 toneladas. La difícil solución a tal cantidad de residuos empujará probablemente al consorcio a resignarse a que el vaso o vertedero del CTR acoja estas balas, ocupando ya la sexta parte de capacidad de este área, equivalente en tamaño a cinco campos de fútbol. El proceso de tratamiento Una vez que las primeras toneladas de basura lleguen el lunes al complejo, el proceso para su tratamiento comenzará con el pesaje y control de los residuos para ello los operarios utilizarán una báscula -con capacidad hasta 60 toneladas- y una zona de análisis con equipos informáticos para procesar los datos obtenidos. Posteriormente, los residuos serán descargados para comenzar la fase del pretratamiento con maquinaria e instalaciones que seleccionan los desechos para el reciclaje y los orgánicos tanto para la fase de biometazación como para el compostaje. En esta parte del pretratamiento existen varias zonas: clasificación, separadores, triaje primario, secundario, separación mecánica y preparación. La biometanización a su vez tiene cinco etapas: pretratamiento húmedo de los residuos orgánicos, digestión anaeróbica, deshidratación, almecenamiento de biogás y aprovechamiento energético. El proceso de fermentación, que da lugar al compost para la venta, se prolonga durante casi un mes. El CTR cuenta también con áreas de oficinas de gestión, aula medioambiental, un red de agua limpia y tratamiento de lixiviados.