«Alguien debe tener el coraje de reconocer que la obra es un error»
La reforma y ampliación del Hospital de León ha motivado un centro de trabajo «laberíntico y monstruoso» en el que algunos trabajadores «caminan de diez a doce kilómetros» durante su jornada laboral, explicó ayer el delegado sindical Galo Benéitez. El hospital se ha convertido en un centro de trabajo «de vanguardia» pero poco funcional que genera constantes problemas funcionales. Algunos trabajadores -explicó Benéitez- pasan casi toda su jornada en desplazamientos por el centro debido al diseño y a las distancias entre unas y otras unidades. Los portavoces de UGT reclamaron a las autoridades sanitarias que asuman con coraje la equivocación de la obra del Hospital. «Hace años reivindicamos un nuevo hospital y el tiempo nos da la razón. Esto es lo que hay», explicó Galo Benéitez. Las obras -matizó- son una «mosca cojonera» para todos y se ha confirmado que un error a la larga. «Esperamos que alguien nos explique cuál es el coste total de la obra» y recuerde el presupuesto inicial, se preguntó el delegado sindical. «Alguien debe tener el coraje político de asumirlo», agregó. Benéitez y Gil recordaron que la conclusión de la primera fase de las obras está prevista para el próximo mes de febrero, pero que aún falta una segunda fase que no está ni presupuestada. Los responsables sindicales abogaron por el cambio en los equipos directivos del centro ya que, a su juicio, «los cargos de confianza y cuadros intermedios son un estorbo que entorpece la gestión del centro, con un talante poco correcto.