«El problema de la cárcel no se arregla de la noche a la mañana»

El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, se mostró partidario de analizar «las peculiaridades y condiciones» de la población reclusa de ls cárceles procedente «básicamente» de países magrebíes como Marruecos y Argelia «y ver los que profesan el Islam o no», con el fin de lograr «un buen funcionamiento» del régimen penitenciario. No obstante, Alejo recordó que no todos los presos procedentes del Magreb «son islamistas», un dato que «hay que tener en cuenta» y admitió que, en términos generales, preocupa la alta concentración de presos de muchas nacionalidades «por que la prisión es un marco cerrado» y ello implica que en ocasiones surjan ciertos «problemas de convivencia» al existir culturas y costumbres distintas. El delegado del Gobierno puso de manifiesto que los problemas de masificación y falta de funcionarios para atenderlos «no se soluciona de la noche a la mañana», ya que en seis meses de Gobierno socialista «sin mirar para a atrás ni meter el dedo en el ojo a nadie» la situación en la que se encuentran los centros penitenciarios «no es la ideal». Alejo reconoció que «las plantillas son insuficientes» y en este sentido aseguró que tras los estudios pertinentes el Gobierno «tomará medidas» para que se pueda atender al número de presos existente. «Mi función es detectar las deficiencias», señaló, tras lo cual el Gobierno «decidirá con rigurosidad» cómo se actúa en «todas las cárceles del país». El delegado precisó que se contempla la construcción de nuevas prisiones en España.