La comisión territorial de Urbanismo lo rechazó hace un año y los promotores han redactado otro
El Ayuntamiento desbloquea el plan de La Barbada para legalizar cien chalés
El Ayuntamiento de Sariegos aprobó hace una semana, de forma provisional, el nuevo plan parcial que han presentado los promotores de La Barbada para urbanizar todo un monte de la localidad de Pobladura del Bernesga. En la zona existen un centenar de chalés ilegales, que se construyeron sobre suelo rústico en la década de los noventa y que carecen de calles asfaltadas, alumbrado público, alcantarillado y servicio de recogida de basuras. El plan ha tenido que modificarse casi al completo, porque hace casi un año, a comienzos de diciembre del 2003, la comisión territorial de Urbanismo rechazó el proyecto por incluir la solicitud de una modificación puntual de las normas urbanísticas de Sariegos para ampliar de 280.000 a 345.000 metros cuadrados la superficie a desarrollar y así construir 552 viviendas. El jarro de agua fría de la Junta reabrió las viejas heridas sobre los desmanes urbanísticos cometidos en el municipio hace una década y que concluyó con la inhabilitación del entonces alcalde, Laudino Sierra, y tres concejales, entre ellos, el ex pedáneo de Pobladura y promotor de La Barbada, Santiago Álvarez. Para evitar suspicacias, el Ayuntamiento también decidió paralizar la tramitación del ambicioso plan parcial y sugirió a los promotores que reformaran el proyecto de acuerdo con la Junta, adaptándose a las exigencias de la comisión. Casi doce meses después, el Consistorio de Sariegos ha recibido el nuevo texto, al que dio luz verde provisionalmente el pasado miércoles en un pleno, antes de remitirlo a la Junta para que dé su visto bueno. Según explica el regidor, Ismael Lorenzana, ahora la comisión territorial de Urbanismo «o lo aprueba o condiciona su aprobación a la realización de determinados cambios que especifique, lo que nos hace confiar en que, por fin, se pueda regularizar la situación de un centenar de familias de Pobladura». Lorenzana reconoce que uno de los objetivos de su gobierno es redoblar los esfuerzos para ajustar al planeamiento actual las viejas urbanizaciones construidas al margen de la legalidad hace años, e insiste en que la prioridad es «ser escrupulosos con la ley y evitar que el nombre de Sariegos vuelva a verse implicado en escándalos urbanísticos».