El cruce de la N-601 con Golpejar de la Sobarriba registra una veintena de accidentes al año
Las obras de la rotonda del Alto del Portillo comenzarán en primavera
El Ministerio de Fomento adjudica los trabajos, valorados en más de 1,2 millones de euros Quince a
Los quince años de reivindicaciones de los vecinos de Valdefresno para que se solucione la conflictiva intersección de la N-601 con Golpejar de la Sobarriba han logrado por fin tener eco. Según los planes del Ministerio de Fomento, la próxima primavera comenzarán las obras para construir una rotonda en esa nacional, que evitará que los conductores se jueguen la vida al intentar atravesar la vía. De hecho, el denominado cruce del Alto del Portillo repite cada año en las estadísticas de puntos negros que elabora Tráfico, con más de una veintena de heridos por accidentes de circulación. Los trabajos se acaban de adjudicar y están valorados en 1.276.262 euros. La nueva glorieta se instalará en el punto kilométrico 322 de la nacional que conecta León con Valladolid y tendrá, según el proyecto, un diámetro de 32 metros. Desde ella se podrá acceder al denominado Cerro Alto -donde se han construido más de 350 chalés-, al polígono industrial de Arcahueja, a Valdefresno, a La Sobarriba y a Las Lomas. El alcalde de este municipio del área metropolitana leonesa, Matías Robles, considera que el desbloqueo de la obra, «que ha costado sudor y lágrimas», es muy importante para el municipio y para los 20.000 usuarios que utilizan a diario la N-601. El regidor recuerda que tras la primera víctima mortal en ese cruce se llegaron a recoger hasta 3.000 firmas para exigir al entonces Ministerio de Obras Públicas que arreglara la intersección de Golpejar de la Sobarriba. Sin embargo, la única solución que se adoptó en esa zona fue construir una media luna que, en ningún caso, ha logrado eliminar el riesgo de cruzar los dos carriles de la N-601 cuando se quiere acceder a la Sobarriba o al polígono. El primer borrador que incorpora la solución de la glorieta se elaboró hace dos años, pero volvió a guardarse en un cajón hasta mediados del 2003, en que se reformó para suprimir la media raqueta situada en la boca del área industrial de Arcahueja. Lista tras el verano Robles confía en que tras la adjudicación definitiva de la obra y la consignación presupuestaria, «de verdad comiencen a construirla en primavera». El plazo de ejecución es de 24 meses, pero el alcalde considera, por la información que maneja, que la rotonda estará lista «como máximo tras el verano del 2005». Robles ha explicado insistentemente en los últimos años que para cruzar la nacional tienen que esperar, a veces, hasta un cuarto de hora, y que los vecinos pasan miedo, porque los vehículos circulan a gran velocidad y el tráfico es continuo. A su juicio, construir una rotonda en ese punto no costaba tanto, porque no se trata de una obra de arte, sino de algo urgente, ya que el tráfico se intensificará con las nuevas viviendas en la zona».