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| Reportaje | Dedicados a la enseñanza |

La escuela de Villafer cumple 80 años

El centro celebró el pasado martes una fiesta en la que se dieron cita varias generaciones de familias del pueblo que recordaron nostálgicas su etapa de escolares entre fotos y libros

Publicado por
Ana Gil - villafer
León

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La escuela de Villafer, perteneciente al Colegio Rural Agrupado (CRA) de Villaquejida, celebró el pasado martes una jornada festiva para conmemorar sus 80 años impartiendo clases. Este centro, que «nació» el 6 de diciembre de 1924, ha acogido en sus aulas a varias generaciones de las familias que viven en este pequeño pueblo de menos de 300 habitantes. En la fiesta se dieron cita, además de los 12 alumnos de la escuela, muchos vecinos de Villafer de todas las edades que acudieron nostágicos en busca de algún recuerdo de su etapa escolar y que se buscaban en las fotos antiguas dipuestas en la sala en la que se celebró el acto. «¿No te llena de satisfacción todo esto? A mí me vienen muchos recuerdos a la cabeza», comentaba una vecina de edad a un señor del pueblo que miraba las fotos en las que se podían ver los pupitres de antes y los artilugios que empleaban entonces para escribir y aprender la lección. «El objetivo de esta celebración tan especial es recordar a quienes llegaron antes que nosotros y agradecer y reconocer el esfuerzo y la entrega de nuestros mayores», explicó el director de la escuela, Ignacio Alonso, quien añadió que «lo que queremos con este acto es conseguir un día en el que se entremezclen las generaciones y en el que participen antiguos alumnos, los escolares de ahora y toda la comunidad educativa en general, además de todos los vecinos que quieran acercarse». Las celebraciones para festejar el 80 aniversario de la escuela, que fueron organizadas por la Junta Vecinal del pueblo y por el personal del colegio, comenzaron al mediodía en el propio edificio que alberga la escuela de Villafer, que llama la atención por su buen estado de conservación a pesar de los años que han pasado y la cantidad de alumnos que ha tenido desde que abrió sus puertas a la primera generación de niños en el año 1924. A la entrada del mismo, una original exposición daba la bienvenida a locales y curiosos atraídos por el evento. Esta muestra era todo un homenaje a la escuela de antaño y a la rigidez de la enseñanza de aquellos años. Las fotos mostraban comon eran las pizarras, pupitres, las plumas con las que escribía y los tinteros con los que se llenaban de tinta, las cartillas y catones que se utilizaban para aprender a leer o las braserillas que proporcionaban calor en las aulas. Pero no sólo podía verse todo esto en fotos, sino que, además, podían contemplarse los auténticos pupitres que se utilizaron en el colegio hace más de medio siglo, gracias a la aportación de algunos vecinos que se solidarizaron con la causa y rebuscaron entre los cajones para aportar desde cuadernillos de escritura hasta timbres y pizarillas pequeñas. Los escolares fueron los encargados de poner la nota de humor entre los asistentes con sus canciones, bailes y actuaciones sobre la escuela, tras lo cual se sirvió un vino español por cortesía de la Junta Vecinal. Una jornada que, sin duda, sirvió de lección a los más pequeños y llenó de recuerdos la cabeza de los más mayores, mientras dejaba constancia de la necesidad de cuidar y velar por la escuela rural.