La Junta convoca 310 plazas en balnearios para ancianos de toda la comunidad
Los leoneses podrán acceder, a lo largo del próximo año, a 310 estancias en balnearios dentro del Programa de Termalismo para Personas Mayores. La convocatoria de plazas que se abre ahora concluye el día 13 de enero para las estancias en primavera, para la que se han dispuesto 135 vacantes para distribuir entre los solicitantes. Las estancias en los balnearios han de ser entre los meses de febrero y junio, y tendrán una duración de diez días. Para la campaña de otoño se podrá acceder a 155 vacantes y el plazo estará abierto entre los días 1 y 31 de junio, según las bases aprobadas por la Gerencia de Servicios Sociales. Las estancias, en este caso, se distribuirán entre octubre y diciembre. Los precios de las plazas oscilan entre 218 y 270 euros que deberá aportar cada persona a los que se unen los 181 euros que aporta la Gerencia. Las estancias pueden elegirse entre los centros termales de Caldas de Luna, Ledesma, Retortillo, Corconte, Palacios de Salinas y Valdelateja. El programa de termalismo para mayores está destinado a mayores de 60 años residentes en la comunidad que, además, no tengan ningún problema médico para acudir los balnearios. Por ello, las bases especifican como requisitos no padecer enfermedad infecto-contagiosa, no sufrir problemas mentales que puedan alterar la convivencia en el centro termal, valerse por sí mismos y carecer de contraindicaciones médicas para la recepción de los programas de salud que se aplican en las termas. Presentación de solicitudes Las solicitudes para poder participar en el programa han de presentarse en la Gerencia de Servicios Sociales siguiendo un formulario específico que debe acompañarse por un informe médico, una fotocopia compulsada de la declaración de la renta y un fotocopia del carné de identidad. Este año, dada la alta demanda en otras campañas, se han distribuido un total de 2.000 ofertas de plazas entre las nueve provincias de la comunidad. La oferta del turismo de salud se amplía a varios alojamientos donde la práctica del turismo rural se conjuga con la del turismo de salud. Los balnearios o estaciones termales han dejado de ser una alternativa turística para personas mayores. Por el momento, la alternativa que se proyecta, refiere solamente a personas de tercera edad.