Hasta el domingo del 2010

El Año Jacobeo 2004 que está a punto de concluir se cierra en León con un balance de más de 30.000 pernoctaciones de peregrinos registrados entre el albergue municipal y el de las Madres Benedictinas o Carbajalas. Las instalaciones del Ayuntamiento acogieron a más de 10.300 caminantes, frente a los 6.351 de 2003, mientras que en las dependencias de las religiosas se alojaron más de 20.000 personas hasta finales de octubre, cuando cerraron para acometer una reforma que aún está en marcha, lo que supone 3.000 más que en todo el año pasado, cuando alcanzaron las 17.000 estancias, según los datos ofrecidos a Ical por responsables de los dos albergues. «Hubiéramos llegado a los 25.000 peregrinos si no es por las obras» afirma Sor Ana María, una de las responsables de la atención a los caminantes, quien asegura que en el albergue la mayor afluencia de caminantes se registró en el mes de septiembre y, especialmente, -como sucede de forma habitual- en mayo. Sin embargo, en las instalaciones municipales fue el mes de agosto el que registró una mayor afluencia de peregrinos. La religiosa benedictina señala que el Año Jacobeo «se ha dejado notar porque, como dicen los expertos del Camino, éste va a más», aunque ella pronostica, sin fecha concreta, un momento en el que el «boom» de los últimos años descienda un poco, debido a la cierta masificación que se produce en algunos momentos en las cosas relativas al Camino. «Llegará un momento en que bajará porque la gente quiere silencio y tranquilidad, para eso salen de las grandes ciudades» afirma. Ella, acostumbrada a tratar con miles de peregrinos, recoge también sus quejas y comentarios. «Algunos se quejan de que hay mucha gente y los ciclistas de que no les admiten en todos los sitios» explica, y reconoce haber vivido experiencias muy intensas sobre el Camino, como la inmensa mayoría de quienes lo recorren. Lo dice quien se muestra convencida de que el peregrino «si vive el Camino, aunque lo haga por turismo, termina haciéndolo por motivos religiosos». Reivindicaciones La celebración del Año Jacobeo que está a punto de terminar ha servido en ocasiones como argumento, excusa o circunstancia idónea para plantear diversas reivindicaciones relacionadas con el Camino de Santiago y con lugares, causas o circunstancias múltiples y heterogéneas. En León, el abanico reivindicativo incluye la exigencia a las administraciones de una mayor atención a las otras rutas jacobeas que no son el Camino Francés. Una reclamación hecha por la Asociación Camino de Santiago Ruta Vadiniense-Picos de Europa, que promueve el recorrido, vigente desde el siglo XII, que nace en el monasterio cántabro de Santo Toribio de Liébana y concluye en Mansilla de las Mulas, donde se une al Camino Francés. También hasta la capital leonesa llegó en este Año Santo, y de la mano del alcalde del municipio segoviano de Santa María la Real de Nieva, Eusebio García, el proyecto para la promoción de la denominada «Ruta de Madrid». Una variante del Camino de Santiago, que llega a tierra de campos, a la localidad leonesa de Sahagún. Se trata de un recorrido que parte de la capital de España y tiene su origen en la Edad Media. El «tirón» del Año Jacobeo no pasó desapercibido para el Patronato de Turismo del Cabildo de Lanzarote, que desarrolló una peculiar campaña de promoción denominada «Xacobeo a camello 2004». Este proyecto tenía como principal objetivo dar a conocer la isla española «dentro del importante escaparate nacional e internacional que supone el Año Santo Compostelano», según explicaron sus responsables. Las iniciativas desarrolladas por el Ayuntamiento de León durante este año incluyeron la edición de 4.000 folletos informativos, 2.000 en castellano y 2.000 en japonés, en los que se refleja la presencia del archipiélago asiático en edificios y expresiones artísticas del Camino de Santiago en la ciudad. Diversidad de gentes Entre los numerosos colectivos que eligieron el jacobeo 2004 para recorrer el Camino, hicieron parada en León un grupo de policías locales y otro de agentes de la Guardia Civil, que iniciaron en el Hostal de San Marcos la etapa correspondiente. Otro lugar emblemático de la ciudad, la plaza de la catedral, fue el destino del llamado Xacobeo Carreteril, protagonizada por un centenar de personas que recorrieron el Camino hacia la capital compostelana con un mensaje de defensa y promoción del desarrollo sostenible acompañados de una talla de diez metros de largo, obra del escultor Humberto Abad que representa el rostro de Santiago Apóstol.