El PP de Asturias afirma que la nueva autovía del PSOE es un «engaño»

El presidente del Partido Popular en Asturias, Ovidio Sánchez, aseguró ayer que el anuncio de la construcción de la autovía León-Campomanes, vía alternativa al peaje del Huerna, forma parte del «sistema habitual de engaño del Gobierno» y pretende ocultar la desaparición de la Alta Velocidad. Para Sánchez, lo que está ocurriendo es la constatación de que el AVE no llegará a la comunidad, con lo que «se margina a Asturias de la red de Alta Velocidad de toda España y esto se hace planteando la puesta en marcha de un ferrocarril de altas prestaciones que no es más que un eufemismo». Según el presidente regional del PP, la propuesta de una nueva autovía con León planteada por los socialistas «no saldrá adelante pero es una estrategia para distraer», ya que el anterior gobierno del PP estudió la zona y no se podía construir porque la carretera chocaba con el ferrocarril y además existía un plan de impacto ambiental. «Cuando se paralizó el tramo Soto del Barco-Muros del Nalón que debería estar previsto para el 2005, el PSOE culpó a Cascos y como vio que esto no funcionaba sacó a la luz el desdoblamiento de la carretera entre Cornellana y Soto, así cuando la gente se da cuenta de que hay retrasos, sacan una nueva obra», explicó. El presidente del PP indicó que la retirada del peaje del Huerna fue una promesa electoral del PSOE y que ahora «ni se quita el peaje ni se va a hacer nueva autovía, lo que sí se va a hacer es quitar la Alta Velocidad». En los años noventa, con los gobiernos socialistas de Felipe González, «se realizó una gran ofensiva contra el AVE inventándose un ferrocarril diferente, ahora siguen apareciendo los mismos vicios que en aquél Gobierno», añadió Sánchez. Para el presidente del PP asturiano, que compareció acompañado del portavoz de infraestructuras del Grupo Popular en la Junta General, Pelayo Roces, la supresión de la Alta Velocidad y la ampliación de los plazos de la Autovía del Cantábrico chocan con los planes del anterior gobierno del PP que pretendía concluir la autovía en el 2007 y el AVE en el 2009. Sánchez afirmó que uno de los objetivos del PP era «superar la hemiplejia que el PSOE había hecho en el noroeste» y por eso se pusieron en marcha infraestructuras para «alcanzar el equilibrio territorial y evitar que todas las obras fueran para el sur y el este de la península». Todas las obras comprometidas El PP, según su presidente regional, pondrá en marcha «todas las medidas a su alcance» por medio de la Junta General del Principado para que se incorporen al Plan de Infraestructuras todas las obras comprometidas y para «exigir al PSOE que no paralice ninguna obra». Para apoyar sus argumentos Sánchez presentó un informe elaborado por su partido en el que se resumen todas las obras llevadas a cabo por el gobierno del Partido Popular entre el año 1996 y marzo del 2004, y en el que se calcula que desde el 96 se habían invertido 1.395 millones de euros en infraestructuras para Asturias y se estaban ejecutando proyectos por importe de 1.792.