La rápida actuación de unos vecinos salva la vida a los propietarios
La explosión de una bombona provoca un incendio en una casa
Manuel tuvo el acierto de cerrar la puerta de la vivienda, con lo que evitó unas llamas más intensas
La explosión de una bombona de butano en el 5º A de la calle Padre Risco número 37, provocó ayer un incendio en la estancia donde se encontraba, que se extendió al balcón. El resto de la vivienda se vio seriamente afectada por el calor y el humo, mientras que el matrimonio que vivía en la misma, de avanzada edad, así como los dos vecinos que les sacaron, no sufrieron heridas de consideración. A las 14.49 horas los Bomberos de León recibían el aviso de lo ocurrido. Inmediatamente una autobomba y un brazo articulado se pusieron en marcha hacia el lugar del siniestro, donde ocho efectivos del cuerpo lucharon contra las llamas hasta su regreso al parque a las 16.30 horas. La explosión de la bombona de butano provocó que los cristales de la vivienda saliesen despedidos hacia la calle, lo que alertó a los vecinos de que algo había ocurrido. La estufa en la que se originó el siniestro se encontraba en una salita por la que se extendieron las llamas con gran rapidez al tiempo que llegó a un balcón en el que se encontraba almacenada leña, lo que contribuyó a incrementar el fuego. Lo primero que tuvieron que hacer los bomberos fue forzar la puerta para acceder a la vivienda, que de forma inteligente había sido cerrada por uno de los vecinos, con lo que se evitó una mayor propagación del fuego. Pero este factor originó que los bomberos se encontrasen con una temperatura muy elevada en el interior del local. Los efectivos atacaron el fuego desde el interior y la extinción fue relativamente rápida, lo que evitó que las llamas se propagasen al resto de la casa. El trabajo del servicio de extinción de incendios concluyó con la confirmación de que no se habían registrado daños en la estructura del edificio. En el piso inferior el agua utilizada en los trabajos de extinción causó pequeños desperfectos en el techo de la estancia que se encontraba exactamente debajo de donde tuvo lugar el fuego. Intervención afortunada Los vecinos del cuarto se disponían a comer cuando escucharon una explosión y un fuerte golpe en la calle originado por la persiana que salió despedida. Padre e hijo, Manuel Suárez, los dos, se pusieron en marcha al escuchar que alguien gritó ¡fuego! Manuel hijo subió y llamó a la puerta, que le tardaron en abrir. En ese momento vio como salían llamas al fondo del pasillo, donde estaba la señora, M.C.D.F., de 78 años, con un cubo de agua. Inmediatamente llegó su padre, quien se internó en la casa y sacó a la mujer. El hijo rescató al varón, E.D.G., de 84 años. Entonces Manuel padre evacuó del edificio al matrimonio. Mientras tanto, el hijo alertó al vecino de enfrente, que no estaba al corriente de lo que sucedía, y cerró la puerta, con lo que evitó una mayor intensidad del fuego.