Fomento decide este mes si amplía el soterramiento en San Andrés

La operación para integrar el tren en la capital leonesa y San Andrés del Rabanedo se estima dentro de un equilibrio presupuestario, según apreció ayer Juan Conde Guzón. De acuerdo con el convenio suscrito por las administraciones a finales del 2002, se fija una inversión de 142,78 millones de euros, de los que 18 saldrán del Ministerio de Fomento y 13 de la Junta. El resto se reserva como fuente de ingreso por las plusvalías que vaya a generar la venta de suelo de la actual ubicación de las vías y otras instalaciones afectadas por el reordenamiento. Juan Conde informó de las 11 actuaciones previstas a lo largo de la línea León-Gijón, en el término municipal de San Andrés, «con el fin de dotar de mayor permeabilidad al término municipal». En este tramo, el Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo ha solicitado al Ministerio de Fomento un alcance de más recorrido en el soterramiento previsto, de tal forma que la línea por la que circule el TAV quede soterrada hasta el cruce de la vía con el tramo urbano de la carretera nacional 120. Se espera ahora que el Ministerio de Fomento adopte una decisión en torno a esta propuesta, que de llevarse a cabo supondría un incremento en los costes de cerca de 40 millones de euros. Esta suma llevaría a los gestores de la operación a replantearse el reequilibrio de presupuestos cuando concluya la operación. A pesar de que la fecha de llegada del tren de alta velocidad a León está concretada en el 2008, es posible que las obras de integración no concluyan hasta el año 2009 ó 2010.