El sindicato celebra que la nueva ley convierta el tema en un asunto social más que policial
Casi 10.000 inmigrantes deberán regularizar su situación antes de mayo
CC.OO. pone en marcha una campaña para informar a los afectados en la provincia
El secretario general de la unión provincial de CC.OO.. Ignacio Fernández, anunció ayer la celebración de diez asambleas informativas sobre el procedimiento de normalización de trabajadores extranjeros, que entrará en vigor el próximo día 7 de febrero y que afecta a los aproximadamente 10.000 inmigrantes que residen en la provincia. El objetivo de las asambleas es dar a conocer el nuevo reglamento a todos los trabajadores extranjeros para que conozcan sus derechos y los trámites que deben seguir para obtener una situación de legalidad en nuestro territorio. Durante su intervención, Ignacio Fernández aseguró que «el arraigo laboral es el principal mecanismo de integración social, por lo tanto, oportunidad, igualdad e integración laboral están contempladas en el nuevo reglamento». Recalcó que la inmigración no es un problema, sino una solución para la sociedad española en general y para la leonesa en particular, ya que enriquece y rejuvenece en este caso una provincia como la nuestra, en la que los datos de despoblación comienzan a ser alarmantes. Destacó que este dispositivo reconoce que se trata de una inmigración de tipo económico no de una invasión, circunstancia que permite la concertación social y la participación de los agentes sociales en la regularización de los inmigrantes. Fernández recordó que el actual gobierno ha recogido gran parte de las tesis de CC.OO. en el nuevo reglamento, lo que supone un cambio estratégico de consideración al tener en cuenta las circunstancias de entrada, de residencia, de trabajo e incluso de sanciones, pero obvia elementos de discrepancia en lo referente a los derechos fundamentales del trabajador. Asimismo acusó al PP de fomentar un sentimiento de fobia hacia la inmigración que se traduce en un aumento cuantitativo de la misma y que sería de un 8% a un 33 %. Fernández afirmó que «la situación clandestina sólo provoca exclusión y desamparo, si lo combatimos estaremos en buena disposición para avanzar» y además aseguró que hay «mucho miedo entre la población ilegal, razón por la cual no se atreven a empadronarse y, en algunos casos, ni siquiera acuden al médico», incluso en situaciones tan terribles como las vividas durante la catastrófica jornada del 11 marzo en Madrid, donde incluso «no se atrevían a identificar a sus familiares». Concluyó destacando que este método «pretende poner en limpio una situación que ya existe, hay una bolsa enorme de trabajadores inmigrantes en situación irregular y por tanto este es el primer paso con el que nos sentiríamos plenamente satisfechos».