Los mejores arquitectos del mundo se disputan el Palacio de Congresos

La nómina de participantes del concurso de ideas para la redacción del proyecto del Palacio de Congresos de León se cerró con 47 aspirantes y la confirmación del alto nivel de las firmas que pretenden desarrollar el edificio de la capital leonesa, pese a la ausencia final de algunos destacados arquitectos del concierto internacional, caso de Rem Koolhaas, Kazuyo Sejima o el portugués Alvaro Siza. La ausencia de este trío de primer nivel, que ha optado finalmente por declinar la invitación, se enjuga con la presencia de despachos de la talla de Zaha Hadid, Dominique Perrault, David Chipperfield o Antonio Citterio, además de los nacionales Rafael Moneo, Enrique Sobejano, Alejandro Zaera, Francisco José Mangado, Abalos&Herreros, Guillermo Vázquez Consuegra, Carlos Ferrater, Aranguren&Gallegos o Javier Fresneda. La confirmación de estos componentes avala la importancia que la instalación pretende tener en la ciudad, no sólo desde el punto de vista funcional, sino como referencia arquitectónica nacional e internacional. Las condiciones excepcionales que posee la instalación, con un edificio de 20.000 metros cuadrados y un entorno de otros 40.000 metros más, han sido claves para que estos arquitectos acepten el reto de la redacción del proyecto, ya que la norma general de comportamiento les aleja de concursos como el leonés. Ya sean estos invitados de forma expresa por su reconocido prestigio o aspirantes libres, las 47 plicas empezarán a ser examinadas esta misma semana por una comisión municipal para determinar el grupo de alrededor de doce firmas que concurrirán a la segunda fase, que debería comenzar a finales del mes de febrero. Los finalistas tendrán por delante dos meses para afrontar el desafío de la redacción de un anteproyecto básico en el que esbozar sus intenciones y diseño, que examinará ya un jurado técnico y no político, encargado de dictaminar el ganador. El correcto cumplimiento de los plazos permitirá que, tras los alrededor de tres meses en los que se desarrollará el proyecto finalista, la licitación de las obras esté iniciada a final de año. El transcurso de todos estos meses, en los que los arquitectos tendrán que desplazarse a León para observar el terreno, permitirá que, a través de un convenio con el Colegio Oficial de Arquitectos de León, se lleve a cabo la proyección de la ciudad a nivel mundial y su situación como referente arquitectónico, mediante charlas y muestras de las firmas implicadas.