El silencio de Antibióticos lleva al comité a plantear de nuevo una huelga

El comité de empresa de Antibióticos acordó ayer convocar una asamblea de trabajadores para el día 16, en la que se propondrá la convocatoria de una huelga y otras movilizaciones, después de que el director de personal del grupo italiano Sir Fidia, Roberto Quber, no acudiera a la reunión que ayer tenía prevista con los representantes de los trabajadores debido a que se lo impedían otros compromisos ineludibles de la empresa. Esta decisión se produce cuando ya se ha cumplido el plazo de un mes de calma que el pasado 30 de diciembre pidió el viceconsejero de Trabajo de la Junta, Raimundo Torío, para dar tiempo a negociar con un supuesto inversor que estaría interesado en comprar la empresa. Esa petición llevó a paralizar las movilizaciones que entonces se planteaban en la fábrica, sin que hasta el momento hayan tenido más noticias al respecto, según asegura un miembro del comité de empresa. Según denuncian los representantes sindicales de Antibióticos, gran parte de la fábrica está sin actividad, como ocurre con las naves de cefalosporinas, una nave de fermentación, que ha reducido la fabricación de 6-apa y de toda la cadena de la planta, además de sufrir una aminoración de la producción de las naves de ampicilina, sin que la empresa haya aclarado los verdaderos motivos de esta situación. Los sindicatos denuncian la continua amortización de puestos de trabajo en Antibióticos y la alta inestabilidad en el empleo, y acusan a la empresa con la reducción de actividad que está llevando a cabo de comprar en el exterior productos que se pueden fabricar en León. Mal ambiente laboral El comité denuncia además que todos los asuntos pendientes de negociación permanecen bloqueados, como la subida salarial pendiente o la aplicación del convenio colectivo, además de acosar a la empresa de acosar a los trabajadores con sanciones y hasta midiendo el tiempo que dedican al bocadillo. En la reunión del comité de ayer también se acordó solicitar una reunión urgente con los responsables de la Junta de Castilla y León para conocer la marcha de las negociaciones sobre la posible venta de la empresa, además de mantener encuentros con el alcalde de León, el presidente de la Diputación, los distintos grupos políticos y la Agencia de Desarrollo de la Consejería de Industria.