La segunda entrega estará dotada con 600.000 euros para 60 viviendas
El ARI atenderá el 100% de las solicitudes de ayuda que reciba
Las peticiones fueron siete veces más que los inmuebles atendidos en la primera convocatoria
La primera convocatoria del programa de subvenciones del Área de Rehabilitación Integrada (ARI), que engloba al casco antiguo y el barrio de El Ejido, ha dejado patente la necesidad de extender la iniciativa en el tiempo para cubrir la demanda, que en este arranque sólo pudo satisfacer a 150 de las 700 peticiones recibidas en las oficinas municipales y se saldó con un presupuesto de 1.625.000 euros. Inmerso ya el plan en su segunda entrega, donde se espera intervenir en cerca de 60 viviendas con un dotación monetaria de 600.000 euros, Mario Amilivia garantizó ayer el cumplimiento del global de solicitudes: «La resolución de esta convocatoria no significa que los que no hayan salido beneficiados no puedan seguir concurriendo a siguientes convocatorias. La intención del ARI es llegar al 100% de las viviendas que lo demanden». El ARI, que se instrumentaliza con el reparto de subvenciones que llegan a los 12.0000 euros para la rehabilitación en fachadas y cubiertas, se ha dividido en dos ejercicios: del 2003 al 2006 y del 2007 al 2009, un horizonte en el que se pretende haber intervenido en un total de 3.000 viviendas de los dos barrios, a través de tres convocatorias por cada uno de los años, gracias a la cofinanciación del Ministerio de Fomento, la Junta y el Ayuntamiento de León. Los criterios por los que se ha regido la convocatoria de ayudas han ponderado diferentes valores en los dos barrios intervenidos. En el caso del casco antiguo se primó, por encima de otros baremos, el nivel de protección de los edificios, la existencia de órdenes de ejecución y la delimitación de áreas prioritarias como el entorno de la plaza del Conde Luna o el de la Plaza Mayor. Por contra, en El Ejido los criterios más importantes se refirieron a aquellas manzanas en las que al menos el 80% de los residentes solicitaron la subvención; algo que se instaurará como norma de ahora en adelante para que las actuaciones sean lo más eficientes posible. María José Alonso, concejala de Urbanismo y Obras Públicas, y Begoña Gonzalo, técnica municipal, refrendaron los argumentos expuestos por el alcalde y presidente del ARI para seguir con la apuesta y potenciar su desarrollo, al tiempo que animaron a los vecinos que se sujeten a las condiciones del programa a que acudan a los servicios del Ayuntamiento.