| Análisis | La inauguración |
Investigación para compartir
Los tres primeros laboratorios de alto nivel de seguridad del noroeste de España están en este edificio abierto al uso de las empresas
Nadie quiso faltar a la cita. A la de la inaguración de uno de los edificios que se convertirá en el referente de la actividad científica de León asistió el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, los consejeros de Fomento y Educación, Silván y Guisasola, el alcalde de León, Mario Amilivia, así como numerosas autoridades provinciales y académicas. El nuevo edificio de investigación alberga los institutos de Biología Molecular, Genómica y Proteómica (primera planta), Sanidad Animal (segunda planta) y Biomedicina (tercera planta). Ubicado frente a la Facultad de Veterinaria, el edificio de 3.500 metros cuadrados se ha financiado con fondos Feder I+D de la convocatoria 2001-2003 (70%) mientras que el 24% restante lo ha pagado la Junta y el otro 6% Caja España. En cuanto al equipamiento científico, dispone de la última generación de aparatos y maquinaria necesaria para este tipo de investigaciones. Además cuenta con dos laboratorios de alto nivel de seguridad, denominados P3, que son los primeros que existen en todo el noroeste de España. También llamados de biotecontención permitirán el trabajo con agentes especialmente patógenos tanto para humanos como para animales. Este tipo de instalaciones, de las que sólo hay cinco en España, harán posible el desarrollo de proyectos de investigación que hasta ahora no se podían afrontar al carecer de una infraestructura de este tipo. Aunque en un principio nace con tres líneas de investigación básicas se pueden ampliar según las necesidades, tal y como explicó el vicerrector de Investigación de la ULE, Marcelino Pérez de la Vega que recalcó que a partir de ahora se «aportarán soluciones a problemas científicos que contribuyan al desarrollo industrial». «A partir de ahora hay que sacar el máximo redimiento a esta infraestructura con ideas, trabajo y esfuerzo», dijo el vicerrector. Una de las peculiaridades de este nuevo centro es que no sólo va destinado a los universitarios sino a cualquier empresa que quiera realizar sus investigaciones. «Queremos compartir este edificio y sus instalaciones», dice el rector.