El secretario de Energía descarta que el protocolo de Kioto perjudique al carbón

El secretario general de Energía, Antonio Fernández Segura, sostiene que el Plan Nacional de Asignación de Derechos de Emisión no tendrá un impacto significativo en el precio de la electricidad y no afectará negativamente al sector de la minería del carbón. Fernández Segura afirmó, en unas declaraciones a la Agencia Efe con motivo de la entrada en vigor del Protocolo de Kioto, que el plan no supondrá una merma de la competitividad para «la inmensa mayoría de las empresas». El secretario general recalcó que el Plan de Asignación no afectará al sector de la minería del carbón ni, en concreto, a la producción de carbón nacional. «Para que no exista la más mínima duda», señaló, «el Gobierno ha acordado y suscrito con los sindicatos y los empresarios que las producciones nacionales cuyo consumo estaba garantizado durante el año 2005 por el vigente Plan de la Minería del Carbón seguirá estando garantizado». Además, añadió, también se garantizarán las producciones de carbón que se pacten en el proceso de negociación del nuevo Plan del Carbón. Fernández Segura señaló que la aplicación del Plan de Asignación no tendrá efectos negativos «para la inmensa mayoría de las empresas», ni por los derechos asignados ni por el eventual impacto en los costes energéticos. No obstante, precisó que «en una proporción muy reducida de casos pudiera haber un efecto menor que no tendría que influir de manera decisiva en la competitividad de nuestra industria», dijo el secretario de Energía. Según Fernández Segura, el reparto de derechos de emisión «no tiene por qué tener un impacto significativo sobre el precio que se fije en el mercado de generación de energía eléctrica». El secretario general explicó que la aplicación del plan sí influirá en el mix de generación (reparto de la producción entre las diferentes tecnologías). Prima a las tecnologías limpias «Es posible que se produzca una mayor utilización de las centrales eléctricas que emiten menos en términos relativos», explicó el responsable del Gobierno. No obstante, Antonio Fernández Segura precisó que esta evolución dependerá también de los cálculos de las empresas y de los costes relativos de producir energía eléctrica empleando un combustible u otro. Fernández Segura subrayó que la economía española estará mejor preparada para afrontar las exigencias del Protocolo de Kioto si durante el periodo transitorio (2005-2007) funciona el comercio de derechos de emisión, ya que «las producciones se habrán concentrado en las tecnologías menos contaminantes», subrayó. El secretario general recordó que el Ministerio de Industria está preparando un plan de acción para mejorar el ahorro y la eficiencia energética en ese periodo. El objetivo principal, dijo, es «aminorar la intensidad energética de la economía española (gasto de energía por cada unidad de producción), ahorrar energía y consumir de una manera más eficiente». El responsable de Industria destacó que «habrá que hacer esfuerzos notables» para reducir las emisiones procedentes de fuentes difusas, como el transporte o el consumo doméstico.