Dejar de ser «pasivera»

Lagartos recurrió a una expresión del sector para resaltar los cambios de la nueva singladura. «Los activos crecen más que los pasivos. De esta forma, rompemos el mito interno de ser una caja pasivera, dedicada al préstamo», afirmó Lagartos. Pero, entre otros datos, el director general explicó que el crecimiento de las inversiones y los beneficios son el aval que demuestra la buena salud y la recuperación de la entidad financiera. Pero el futuro es una preocupación en la que los directivos de Caja España ya se encuentran inmersos. «El plan base de 2003-2006 tiene como objetivo seguir creciendo en cuanto a balance», afirmaron. La presencia en empresas, la vinculación de clientes de diferentes sectores, las hipotecas y la potenciación de la red comercial completan los apartados en los que se trabaja. Y toda esta política, también tendrá como una de las señas de identidad, «no una política proactiva en la especulación sino en el mantenimiento», señalar