León, entre las provincias que menos paga en impuesto de circulación
Los conductores de la provincia de León son de los que menos pagan en impuesto de la circulación, tal y como se desprende de un estudio publicado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA). Así, en Castilla y León, entre las tarifas de Valladolid y Soria, las más caras, están la de Burgos, con 54,52 euros y las de Salamanca y Segovia, con 53,88 euros y 53 euros, respectivamente. Por detrás de ellas, 51,35 euros cuesta en León, 50,10 en Ávila, 45,18 en Palencia y 40,56 en Zamora. Los impuestos municipales de vehículos cuestan a los conductores de Castilla y León más de 83 millones de euros al año,, según este estudio, un 5,6 por ciento de los 1.450 millones de euros que se recaudan en toda España. AEA denuncia que las diferencias entre las tarifas de distintos ayuntamientos provoca un éxodo hacia «paraísos fiscales». Entre éstos, se encuentran, según sus cifras, Soria, Zamora y Palencia. En un comunicado, AEA señaló que el impuesto del mismo vehículo de tipo medio de entre 8 y 11 caballos de potencia fiscal es un 48,3 por ciento más caro en Valladolid que en Soria, ya que supone 58,12 euros en la primera y 39,19 en la segunda. Entre zonas de España hay diferencias tan abultadas como los 17,04 euros que cobra el Ayuntamiento de Melilla y los 68,15 de Barcelona. Las más caras Entre las capitales más caras se encuentran Barcelona, San Sebastián, Lleida, Tarragona, Bilbao, Córdoba y Granada, y entre las más baratos, además de las mencionadas Palencia, Soria, están Melilla, Ceuta, Pamplona, Cáceres, Pontevedra, Badajoz y Alicante. En lo referente al «éxodo de automovilistas», AEA destaca que los propietarios de grandes flotas de vehículos los matriculan en determinados municipios con tarifas bajas. La alta fiscalidad, dice el informe, motiva que miles de automovilistas cambien su lugar de empadronamiento. Mientras, el censo de población de estos ayuntamientos apenas sufre variación, el parque automovilístico aumenta con incrementos de más de un 2.000 por cien. Como ejemplos, AEA cita el municipio catalán de Aguilar de Segarra, con 224 habitantes y un parque de 15.073 vehículos, lo que supondría 67,2 por habitante. Respecto a las motocicletas también hay diferencias e incluso son mayores. Una motocicleta de 500 centímetros cúbicos paga en Melilla 7,57. Sin embargo, en San Sebastián este mismo veh¿culo paga 33,33 euros, es decir, un 340% más caro. Según AEA, las diferencias en las tarifas se producen no sólo entre ayuntamientos de distintas comunidades autónomas sino incluso entre poblaciones de una misma provncia.