Los no adscritos dejan por primera vez solo al PP en la defensa del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua

El Ayuntamiento de León acordó ayer desvincularse del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua como patrono y abstenerse de colaborar económicamente o de cualquier otra forma, con los votos afirmativos de la UPL, el PSOE y los dos concejales no adscritos, que dejaron solos por primera vez a sus actuales socios de gobierno del PP y contravinieron el criterio de la mayoría establecida tras la moción de censura del pasado 3 de diciembre del 2004. Los leonesistas, promotores de la iniciativa de desmarque, defendieron que la institución «sólo supone el pago de una soldada -21.000 euros según la estimación del último año y cuyo desembolso no se realizó- y no ha tenido más que dos actividades del global de 42 realizadas durante sus cinco años de existencia». Los leonesistas se ampararon en que «ya existe la Real Academia de la Lengua y el Instituto Cervantes para velar por la pureza del español» y que lo más normal sería entonces crear «un Instituto de la Lengua Leonesa»; siempre parapetados en que «sólo se mira por lo castellano y se olvida lo leonés». Chamorro recurrió a que «lo leonesista es salirse por esencia e ideología política porque está pensado por y para Castilla; algo que se llevó tras de sí el voto afirmativo de los diez concejales socialistas. José María Rodríguez de Francisco y Covadonga Soto también sumaron su mano para la salida no sin dejar de advertir que «se podía enriquecer la moción» y que «no supone ningún resquebrajamiento del equipo de gobierno». El añadido de los elementos dejó estéril el intento del PP por conservar la presencia en el instituto».