La constructora prepara la estructura para acometer el paso inferior
Avanzan las obras para eliminar el cruce de la variante de Mansilla
El proyecto fue licitado hace un año y en noviembre comenzaron las primeras actuaciones
El cruce de las carreteras nacionales 625 y 601, a la altura de Mansilla de las Mulas, desaparecerá a finales de este año, si se cumplen las previsiones de adjudicación del Ministerio de Fomento. Después de los primeros movimientos de tierra en la zona, y tras varias semanas de trabajos sólo interrumpidos por la climatología adversa del invierno, en la intersección ya se observa un estado avanzado de las obras, encaminadas a construir un paso subterráneo bajo la carretera Gijón Adanero, en su kilómetro 309, que dará continuidad a la Nacional 625, en dirección a Riaño. Las obras en el cruce de Mansilla, punto trágico de las carreteras leonesas por la suma de accidentes mortales que acumula desde que se ejecutó la variante de la localidad del Esla, es una de las demandas vecinales más escuchadas en esta zona de León, extendida por los usuarios de esta vía que encauza la comunicación de las comarcas más orientales de la provincia con la capital. El desarrollo de las obras en la actualidad prepara la estructura para sustituir el cruce por el paso inferior y por un enlace de tipo de trébol parcial, situado hacia el sur, con ramales unidireccionales de 4 metros, arcenes interiores y exteriores y dos intersecciones en forma de t con la N-625 canalizados en isletas triangulares. La actuación está publicitada con un coste de 2.564.006 euros. En el año 1996 se dictó la orden de estudio de redacción del proyecto para eliminar este siniestro cruce, que fue aprobado seis años más tarde; dos años, antes, precisamente, de que el anterior gobierno decidiera la licitación (que anunció en febrero del año pasado) en más de tres millones y medio de euros y en un plazo de ejecución de doce meses.