Los municipios «muy mineros» recibieron el 80% de los fondos destinados a infraestructuras locales
Las zonas que han sufrido en mayor medida la reestructuración minera, aquellos municipios que el Plan del Carbón denomina «muy mineros», recibieron el 80% de los fondos destinados a realizar infraestructuras locales, según las conclusiones del balance realizado por el Ministerio de Industria. Las principales actuaciones en la provincia en este apartado se han destinado a la creación de suelo industrial, la mejora en la calidad de vida (urbanismo, saneamiento de aguas, medio ambiente,...) y a la creación del Campus de Ponferrada. Iniciativas que en el programa de actuaciones hacen hincapié en la necesidad «no sólo de cubrir necesidades, sino de conseguir la transformación y la modernización de los territorios». En los ocho años de vigencia del plan la dotación para la realización de infraestructuras se elevó a 2.404 millones de euros, de los que más de 600 se han invertido en Castilla y León. Las actuaciones de este apartado se incluyen en el denominado Plan de Desarrollo Alternativo de las Comarcas Mineras, que más allá de la reestructuración de la minería del carbón tiene como objetivo poner en práctica una política de reactivación de la economía en las comarcas afectadas por la reconversión, sobre «la base del impulso al desarrollo de actividades económicas alternativas al monocultivo del carbón». Las ayudas de este programa se dividen en tres sectores: infraestructuras (transporte, suelo industrial y medio ambiente); proyectos empresariales (generación de empleo) y formación profesional. Coherencia Todas las intervenciones en materia de infraestructuras están guiadas por unos principios de gestión que se resumen en la adicionalidad (los recursos se suman a otros de instituciones y administraciones, no los sustituyen); coherencia (con los planes de desarrollo a nivel local, comarcal y regional) y especialidad (las actuaciones se concentran en los municipios que más han sufrido la reconversión minera). Desde los sindicatos se añade la necesidad de unificar los esfuerzos de todas las administraciones, de agilizar la ejecución de los programas y la disponibilidad de los fondos, de participación de los actores en la reactiviación y de aprovechamiento del capital endógeno (capital humano, recursos naturales y recursos económicos). Industria reconoce que no tiene criterios para juzgar si se han cumplido los criterios de adicionalidad y coherencia.