Los alcaldes de las zonas afectadas esperan a conocer el trazado exacto, pero se muestran contrarios

Los alcaldes de los municipios leoneses afectados por el trazado de la línea de alta tensión entre Lada y Velilla también han querido mostrar su opinión al respecto. Así, el alcalde de Cistierna, Nicanor Sen, explicó que «cuando se conozca el trazado exacto y la ocupación que tendrá en el municipio, se hará una votación con todos los políticos». Por su parte, el regidor de Valderrueda, José Antonio Rodrigo, recordó que «esta zona está saturada de líneas de alta y baja tensión», a la vez que manifestó su intención de convocar una reunión urgente con todos los alcaldes «para estudiar el trazado y hacer todas las alegaciones necesarias». La noticia ha caído también como un jarro de agua fría al primer edil de Prado de la Guzpeña, Manuel Mesa, quien comentó que «las malas noticias siempre les toca a los mismos» y recordó que «aquí se está olvidando a los propietarios de los terrenos, que son las juntas vecinales». Olga Rodríguez, alcaldesa de La Ercina, precisó que, oficialmente, «no tenemos nada sobre la mesa y no podemos hacer valoraciones gratuitas». Los alcaldes de la Montaña Central afectados por la línea de alta tensión rechazan frontalmente este proyecto, a pesar de las compensaciones económicas previstas. El regidor de La Vecilla, Francisco Rojo, considera que «habrá que estudiar las condiciones del sí o no al proyecto», al tiempo que insistió en que «sin información no sabemos sus inconvenientes ni garantías». Por su parte, el alcalde de Santa Colomba de Curueño, Basilio Martínez, no pudo ser localizado por este periódico, mientras que el primer edil de Valdepiélago, Julio González, insistió en que «si el proyecto es malo para Picos, también lo será para el Curueño».