La Junta inmunizará a todo el ganado que permanece en Extremadura
Cien mil vacunas contra la lengua azul posibilitarán la trashumancia
La vacunación se iniciará a partir del día 20 y se repetirá cuando las reses lleguen a los puertos
El ganado leonés podrá realizar en junio la trashumancia a los pastos de montaña con la intervención de una vacuna contra la lengua azul. Las normas preventivas por esta enfermedad, que impiden el movimiento de reses desde los pastos de invierno del sur (en Extremadura, principalmente) a los puertos leoneses, restringen desde la primera semana de abril el regreso de los animales. El director general de producción Agropecuaria de la Junta de Castilla y León, Baudilio Fernández-Mardomingo, anunció la adquisición de cien mil dosis de este tratamiento por parte de Ganadería para aplicar a partir del día 20 de mayo y por espacio de una semana. El calendario de la inmunización resulta vital para cumplir con los plazos temporales que evitarían más pérdidas a los ganaderos que mantienen sus rebaños en las dehesas extremeñas, donde escasean esta año los pastos por causa de la sequía. La vacuna garantiza la inmunidad por espacio de un mes; de esta forma, el ganado trashumante podrá iniciar su regreso a los pastizales de verano en la última semana de junio, tal y como se realizaba en años anteriores. Fernández-Mardomingo explicó que las cien mil dosis de la vacuna van a correr a cuenta del Ministerio de Agricultura, que ya dispuso financiación suficiente para la cantidad de siete u ocho millones que aplicó en las regiones de Andalucía y Extremadura, declaradas como zona restringida por lengua azul y sujetas a medidas excepcionales desde el día 8 de abril. La Junta repartirá las vacunas entre los rebaños de ganaderos de León, Ávila, Palencia y Salamanca. «Se trata de una vacuna muerta que aporta total protección contra la lengua azul, por lo que no debe de tener por qué haber reacciones secundarias», subrayó Fernández-Mardomingo, que estimó en una semana el plazo en el que podría estar vacunada toda la cabaña ganadera. La operación se va a repetir una vez que las reses hayan llegado a sus pastos veraniegos. Medida aceptada Los ganaderos afectados por la inmovilización de reses dictada por el Ministerio de Agricultura ven con satisfacción las medidas adoptadas por las autoridades al evitar, principalmente, el movimiento de las cabezas de ganado desde zonas restringidas, aunque no se hubiera detectado presencia del mosquito que transmite la lengua azul. No obstante, ahora esperan soluciones para hacer frente a los gastos que les ha ocasionado la sequía, derivados de la escasez de pastos y agua. Los efectos del foco de lengua azul que obligó a la declaración de zona restringida la mitad sur de la península en octubre del pasado año siguen presentes en primavera: las primeras medidas correctoras afectaron al regreso trashumante de las montañas del norte; ahora, modifican el viaje a los puertos.