«Hay que recuperar el espíritu luchador verde de los años 80» Feve renueva el Transcantábrico y prevé recibir 2.500 viajeros este año

El abogado catalán Marc Viader realizó en los años 80 numerosos viajes a la provincia de León. Fue el defensor de cuatro familias cuyos maridos e hijo murieron en el accidente minero en el que perdieron la vida ocho mineros de Fabero. Hoy regresa a León, sta vez como escritor a presentar su libro Ecocupido, historia de los Verdes 1983-1989 en la biblioteca Gumersindo Azcárate de la Fundación Sierra Pambley a las ocho de la tarde. -¿Qué es Ecocupido? -Es una fantasía con un papel de encantador y enamorador del conjunto social de la naturaleza, que utilizo como recurso para realizar una aproximación al conocimiento de los orígenes y las causas por las que los deseos y avances de los Verdes europeos no se cumplieron en el espacio político español en la década de los 80. -¿Dejaron huella aquellos años en España? -Sin duda alguna. La actividad ecologista en España, tanto política como activista, hizo que la sensibilidad ciudadana creciera respecto de la ecología. Ya no se ha vuelto para atrás, a pesar de que hay fenómenos de agresión a la ecología. -¿Qué acontecimientos destaca de aquella época? -La contaminación del Rhin por un vertido de la fábrica Sandoz levantó una oposición clarísima, pero a su vez las poderosas empresas de la industria química, aprendieron esos métodos que ahora están muy normalizados de lavarse la cara con asesores cuando producen una agresión ecológica. Hay otro hecho importante; la catástrofe de Chernobil. Nos decían que estábamos fuera de lugar y cuando se produjo esa catástrofe quedaron hechos añicos los argumentos del lobby nuclear. El libro no queda en el pasado, se encuentran elementos de actualidad. Hay unas respuestas actualísimas sobre lo que se tiene que tener presente actualmente ante las olas destructivas de la globalización. Los pronósticos de consecuencias graves para la destrucción del planeta, aunque se hayan demorado, siguen vigentes: sólo hay que pensar en el cambio climático. -¿Hay que recuperar el activismo? -Yo diría que sí. No se puede entrar en un conformismo, hay que salir de eso y recuperar aquel espíritu luchador que hubo en los años 80. -¿La oposición verde a la presa de Riaño es un hecho destacado en el libro? -Riaño está repetidas veces porque demostró la vitalidad de la juventud española. Era como un espejo de todo el territorio. Lo viví como catalán, pero a la vez muy cerca porque viajaba al Bierzo por el caso de Fabero. La compañía Feve ha renovado el Transcantábrico, el tren turístico que ofrece recorridos de ocho días entre Santiago de Compostela y León durante la temporada de mayo a octubre, y espera recibir unos 2.500 viajeros este año, 500 más que en el 2004. La ocupación del Transcantábrico será del cien por cien para los dos primeros meses de la temporada, frente al índice del 68% que se alcanzó en la anterior, explicó ayer el jefe de trenes turísticos de Feve, José Antonio Rodríguez. El tren, que se inspira en los legendarios Orient Express y Transiberiano, ha sido renovado después de 22 años de historia para mejorar la calidad que ofrece a sus clientes. Así, explicó Rodríguez, se ha cambiado el interiorismo del tren, se han introducido algunas variaciones puntuales en la ruta y se cuenta con una tripulación más experta. El tren ofrece 26 habitaciones dobles, de las que 7 se han transformado en individuales para atender la demanda de los grupos de amigos que deciden hacer esta ruta, y un total de 52 plazas.El viaje, de ocho días y siete noches, cuesta 3.000 euros en habitación individual y 4.000 en una doble. | dl