Badiola aboga por que el control en el paso de las reses sea estricto

El análisis de la situación actual de la epidemia de la lengua azul -que tiende a reducirse merced a la dureza del último invierno- sirvió para que el presidente del Consejo General de Colegios de Veterinarios de España, Juan José Badiola, mostrara como precepto básico para la prevención «el cumplimiento estricto de las medidas de control sobre el movimiento de reses», por encima de que «en ocasiones, tanto los ganaderos como las autoridades se sientan tentados a rebajar estas disposiciones de seguridad». Badiola, que acudió a la inauguración de la nueva sede del Colegio de Veterinarios de León -uno de los más destacados a nivel nacional, con más de 800 colegiados-, no quiso entrar a valorar la denuncia del sindicato Uscal sobre las presiones de la Junta para permitir la entrada de ganado sin el control sanitario precedente: «No conozco personalmente el caso, pero respeto la opinión de mis compañeros, que si lo han dicho es que hay algo de verdad», esbozó el máximo mandatario del gremio nivel nacional, que de todos modos argumentó que «Castilla y León tiene un problema porque es muy grande, muy ganadera y está rodeada por muchas comunidades, lo que hace muy complicado vigilar con rigor», aunque defendió que «la Junta trata de ser seria siempre». El consejero de Agricultura, José Valín, que coincidió en el acto con Badiola, evitó dar consideración a las manifestaciones del sindicato Uscal y zanjó el requerimiento sobre su supuesta veracidad con el aserto de que «es una llamada de atención a la opinión pública enmarcada dentro de su política de movilizaciones para reivindicar».