La demanda de vuelos determinará el futuro desarrollo del aeropuerto

El asfaltado de la ampliación de la pista, que comenzará en esta semana, permitirá cumplir los plazos para que el aeropuerto de León reciba aviones de mayor capacidad a partir de julio. En ese mismo mes estarán listas todas las infraestructuras para que se pueda implantar el ILS, un sistema que facilita el aterrizaje en condiciones de escasa visibilidad, que estará listo en septiembre. Una vez concluidas estas remodelaciones «la mayor parte de las obras previstas estarán concluidas y una futura ampliación estaría supeditada a la demanda», matizó el director del Aeropuerto de León, Rafael Escobar. El estudio de planeamiento, que abarca tres años, tiene previstas pequeñas inversiones para este periodo, pero no grandes actuaciones ya que con la ampliación y el ILS el aeropuerto «satisface las necesidades de los leoneses y garantizan el máximo nivel», puntualizó Escobar. El subdelegado de Gobierno, Francisco Álvarez, visitó ayer el aeropuerto para comprobar el ritmo de las obras y anunció que la inauguración de la ampliación podría ser una buena «excusa» para que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, viaje a León. Álvarez aseguró que con las obras de ampliación el aeropuerto disfrutará de «una capacidad operativa importante y con todas las garantías», además de ser «un soporte para el desarrollo económico de León». Una vez que la ampliación de la pista funcione a pleno rendimiento, en el próximo otoño, serán las compañías aéreas las que decidan qué tipo de aeronaves aterrizarán en el aeropuerto leonés. La habilitación de nuevos hangares estará supeditada a las compañías que operan en León y el director del aeropuerto apuntó que se está buscando un acuerdo para que la solución del repostaje sea rentable. Escobar anunció que el sistema de depósito de combustible estará listo a finales de año. La inversión de esta ejecución asciende a 14,5 millones de euros de los que diez millones se han destinado a la ampliación de la pista.