Servicios Sociales protesta por el regreso del mercado a Colón

El pasado día 24 de mayo el mercado de Colón regresó a su entorno habitual después de tres años en el paseo de Papalaguinda. El motivo del traslado fue la construcción del edificio que ahora alberga la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, que además incluye un centro de día. Los más de cien puestos que componen el conjunto del mercado, que se celebra martes y viernes, se han distribuido sobre todas las aceras de la plaza y alrededor del nuevo edificio de la Gerencia. La directora del centro de día que está situado en la planta baja del edificio, Natividad Gutiérrez, aseguró que está situación «afecta mucho» porque algunos de los puestos entorpecen la entrada a las 600 personas que acceden cada día al inmueble. Gutiérrez teme que en el mes de octubre, cuando comience a funcionar la Unidad de Estancias Diurnas del centro de día, la situación se complique aún más. Muchos de las personas que acudan a esta unidad serán asistidos y precisan de un transporte especial y que, en algunos casos, se desplazan en sillas de ruedas. La cantidad de gente que asiste al mercado dificulta el acceso de los vehículos. Los vendedores también ocupan el aparcamiento reservado para transporte adaptado especial (como minibuses o ambulancias), lo que agrava todavía más la situación. Según Gutiérrez, los vendedores tampoco están a favor de regresar a Colón. «El problema se complicará más en octubre, quien tenga la responsabilidad que lo resuelva, y cruzo los dedos para que no tengamos una emergencia y necesitemos una ambulancia», remató Natividad Gutiérrez. La directora del centro de día comentó que la gerente, Aurora Rodríguez, ya ha hablado con los responsables municipales. Los vecinos del entorno también protestan por los problemas que genera el tráfico y por el ruido. A partir de las 6.30 horas los vendedores comienzan a colocar la mercancía y las furgonetas colapsan el tráfico y los aparcamientos. Desde el Ayuntamiento, la concejal de Consumo, Teresa González, señaló que ya se han solucionado «quejas puntuales» de los vecinos, como la obstrucción de vados y que una pareja de policías patrulla los días de mercado por si fuera necesario despejar el mercado por una urgencia en el menor tiempo posible. Además, añadió, que ninguna de las entradas está obstruida por los puestos. La edil declaró que desde Gerencia «no se ha informado de ninguna queja, pero se han establecido los medios para convocar una reunión entre ambas partes». A pesar de que tanto Gerencia como los vecinos apuestan porque el mercado regrese a Papalaguinda, Teresa González puntualizó que es una manera de revitalizar el comercio fijo de la zona y que estos habían reclamado su regreso.