El proyecto, de 2,4 millones, ayudaría a legalizar las cuadras en los pueblos
Los ganaderos lácteos impulsan un centro de recría pionero en León
Vega Esla pide a la Diputación que le ceda una finca para la explotación de novillas
Los productores lácteos de la provincia de León quieren disponer a corto plazo de un centro de recría de novillas para salvar el límite de unidades ganaderas que impone la nueva ley de cuadras en casco urbano, y que imposibilita la legalización de muchos establos. Los promotores de la iniciativa, ganaderos asociados a la cooperativa Vega Esla, ya ha conseguido que la Junta de Castilla y León comprometa una parte importante de la financiación. La otra parte del intento depende de la Diputación de León, organismo al que se han dirigido los ganaderos para conseguir una parcela en la que instalar el centro. «Esperamos ahora una contestación. Creemos que podíamos dar un uso práctico a parte del terreno que la Diputación tiene en el Páramo», indica José Antonio Herrero, de la cooperativa Vega Esla, que destaca que la instalación ganadera, capaz de recibir a 4.000 novillas, estaría abierta a todos los ganaderos de la provincia. El proyecto, a imagen de uno que ya funciona en Aragón, es una fórmula ideal del reposición de vacas de leche y permite recriar mejor porque la atención a las terneras se clasifican por edad. «También mejora la atención sanitaria y libera de ugm a las explotaciones lácteas». El coste aproximado del centro alcanzaría los 2,4 millones de euros. El director de producción agropecuaria de la Junta, Baudilio Fernández-Mardomingo, y el jefe de servicio de Agricultura en León, Fidentino Reyero, se reunieron ayer en Toral con ganaderos de la zona para debatir sobre la cuota láctea y a cerca de los efectos que la ley de cuadras va a tener sobre el sector lácteo en León.