Más de 1.900 personas recurrieron al servicio de orientación laboral de UGT

La Unión General de Trabajadores ha revelado que más de 2.200 parados solicitaron ayuda a su servicio de Orientación Profesional para el Empleo y el Autoempleo que el sindicato (Opea). Una cifra en la que se incluyen las personas que participaron en acciones de orientación laboral, más de 1.900, así como las 300 que solicitaron ayuda en materia de autoempleo. Tal como señaló Ramón Sánchez, secretario provincial de UGT, «este programa de orientación laboral tiene como objetivo facilitar la reinserción laboral de los desempleados orientándoles en la búsqueda de empleo y también en la opción del autoempleo». El único requisito para acceder a este servicio es que la persona que lo solicita esté apuntada en el Ecyl como demandante de empleo. Cumpliendo esta condición el solicitante puede participar en distintas actividad de orientación de tipo individual o en grupo. Según Silvia Mª Suárez, coordinadora provincial del servicio Opea, «la más demandada es el taller de entrevista. Se trata de una acción grupal en la que se enseña al solicitante a ejercitar unas determinadas conductas para afrontar con éxito la entrevista de selección». Asimismo, la coordinadora provincial reveló que el 68% del total de parados que utilizaron este servicio el pasado año fueron mujeres. «De este porcentaje, el perfil más destacado lo componen las féminas de entre 18 y 35 años con estudios medios», apuntó Silvia Mª Suárez. Además de las actividades de orientación laboral, el servicio Opea cuenta con acciones orientadas al autoempleo. En ellas, se facilita a las personas que han elegido esta opción información de utilidad sobre subvenciones y se les acerca a un plan de empresa. «La novedad en el caso de la iniciativa empresarial es que se alcanza la paridad entre hombre y mujeres», señaló Carlos Vallaure, técnico de autoempleo de la oficina de León. Según los datos ofrecidos por UGT, un 60% de las personas que se decantan por esta posiblidad tiene estudios medios o superiores. Para Vallaure, «los desempleados aprovechan esta formación para desarrollar un negocio por cuenta propia, sobre todo en actividades relacionadas con el sector servicios. La hostelería suele ser una de las opciones, tal como se ha visto en algunas zonas como La Pola, donde se concentran un gran número de nuevos establecimientos debido a la obras del tren de alta velocidad». Este servicio, fruto de la colaboración entre el sindicato y el servicio público de empleo de Castilla y León (Ecyl), cuenta con oficinas implantadas en todas las capitales de provincia de la comunidad. Dos de ellas están situadas en la provincia leonesa. En la delegación de Ponferrada, trabajan dos personas mientras que en León, el equipo está formado por doce profesionales, entre los que se incluyen psicólogos, psicopedagogos y un economista que se encarga de las acciones orientadas al autoempleo. Durante de la campaña, que tiene una duración aproximada de nueve meses, los técnicos de la Opea visitan distintos puntos comarcales para que los parados que no residen en la capital puedan beneficiarse de este tipo de ayudas. El pasado año, el servicio incluyó localidades como Villablino, Bembibre, Astorga o La Bañeza. En el 2005, la Opera tiene previsto mantener el mismo itinerario y llegar a otras localidades como Cistierna y la Robla para que un mayor número de parados descubran sus carencias y aprovechen todas sus recursos y capacidades en la búsqueda de un nuevo empleo.