Reclaman el acceso a una vivienda digna
Los habitantes del asentamiento, según las palabras de su representante, Ricardo Torres, rechazan la propuesta del Ayuntamiento de financiar el 75% de la renta de un piso durante un año. «Nadie alquila una casa a los gitanos y aún así cuando finalice este periodo nos volveremos a encontrar en la calle», explicaba Torres que reclamó el acceso a una vivienda de protección oficial. «No queremos que nos regalen nada, pero tenemos derecho a una vivienda digna», añadió. El patriarca puso cordura Cuando peor pintaban las cosas, apareció el tío Caquichu para poner cordura. El patriarca de los gitanos en León hizo una llamada a la tranquilidad y consiguió que los habitantes de La Veguilla se metieran en las casas para que no se produjeran más enfrentamientos. Cuando los ánimos se tranquilizaron, el presidente de Garapatís se dirigió al Ayuntamiento de León para entregarle al regidor municipal un escrito en el que quedaba reflejada la situación de las familias que se enfrentan al desalojo, «se van a quedar en la calle con varios niños pequeños». Ricardo Torres agradeció al alcalde su disposición para que se ponga fin al problema y no se vuelva a producir una situación como la que se vio ayer en las calles del barrio leonés. «En mayo mantuvimos una reunión con el alcalde y con la concejala de Bienestar Social, Ana Guada, en la que se dio prioridad absoluta a la resolución de este problema», subrayó el presidente de Garapatís y declaró que el edil «se va a disgustar mucho cuando le cuenten que esto no está resuelto». Con la actuación de ayer se pretendía continuar con las actuaciones emprendidas en noviembre, cuando se derribó la primera de las 16 viviendas del poblado, esta vez sin ningún tipo de incidente, para construir pisos. Más de 40 niños En el poblado de La Veguilla hay más de 40 menores, que presenciaron, entre lloros, el espectáculo dantesco que se produjo cuando se iba a acometer el desalojo. Uno de los argumentos esgrimidos por las familias de etnia gitana era-precisamente-la situación en la que se van a quedar los más pequeños, «¿Qué va a pasar con ellos?».