El juguete que ahogó al niño procedía de China y se distribuyó desde Valladolid

La Inspección de Consumo de la Consejería de Sanidad localizó e identificó ayer en un establecimiento distribuidor de Valladolid, Comercial Elche, tres ejemplares similares del modelo de juguete que pudo causar la muerte del menor de cuatro años, M.Á.J. Si bien, todavía se desconoce si el objeto cumplía con la norma de seguridad en los juguetes EN-71-1 por lo que la Consejería, siguiendo el protocolo de actuación en estos casos, remitió al Centro de Investigación y Control de Calidad de Madrid los datos oportunos para que sea éste quien lo determine, según informó Ical. Todo parece correcto En el embalaje del juguete aparecía el símbolo que prohibía su uso para menores de tres años -el niño fallecido tenía cuatro-, además del sello de homologación europeo CE y que estaba fabricado en China, por lo que, según explicó el director general de Salud Pública y Consumo, José María Arribas, «en principio el etiquetado es correcto». Si bien, precisó que habrá que esperar a los datos que aporte el centro de control. Hasta que concluyan las investigaciones y según el Sistema de Intercambio Rápido de Información (SIRI) por el que se tramitan las redes de alerta de productos peligrosos, la Consejería de Sanidad ha comunicado al Instituto Nacional de Consumo (INC) los datos de que dispone para que los traslade al resto de comunidades autónomas y efectúe, si así lo considera, la alerta sobre la potencial peligrosidad del producto. Además, como medida preventiva, la Junta está retirando juguetes similares para ver si son peligrosos, según el director general de Salud Pública y Consumo, Arribas, quien precisó que este juguete no se correspondía con ninguno de ocho artículos que contenían ventosas sobre los que se lanzó una alerta este año en toda España.