El nuevo reglamento salva el periodo ventana para las infecciones

La normativa que regirá, desde noviembre, la extracción y transfusión de sangre permitirá salvar el período ventana de las enfermedades y así evitar que bacterias o virus en incubación puedan ser transfudidos a un receptor. A partir de esa fecha se realizará, explicó ayer Martín Manceñido, una prueba de biología molecular que posibilitará la detección de cualquier antígeno en la sangre que «pudiera producir algún problema posteriormente». La sangre se mantendrá en reposo durante el tiempo que dure la realización de la prueba con el objetivo de «transfundir sangre con una garantía cercana al 100%», indicó el responsable de la Fundaspe. Asimismo se realizará una leucoreducción, eliminación de los glóbulos blancos, para evitar que se transmitan las bacterias que van pegadas a este componente sanguíneo desde el donante hasta el receptor. La nueva normativa, aún en período de redacción, posibilitará también la donación altruista de los mayores de 65 años cuando el facultativo, por razones de salud, así lo autorice. Del mismo modo se está intentando rebajar el límite mínimo de edad establecido ahora en 18 años hasta los 17 años, con autorización paterna.