| Reportaje | Balance de una iniciativa social |
Un plan para trabajar
Más de 580 personas se acogieron durante el 2004 al programa de Itinerarios de Inserción Sociolaboral, promovido por la Concejalía de Bienestar Social y subvencionado por la Junta
Mujer de entre 20 y 40 años de edad, con formación precaria, casadas o que conviven en pareja, con serias cargas familiares y en paro por un periodo superior al año. Este es el perfil de las personas que se acogen al Plan de Itinerarios de Inserción Socio-Laboral de la Concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de León, según informó ayer la concejala de este área, Ana Guada. De todos modos, aseguró la concejala que las mujeres son una mayoría dentro de este programa en el que también participan varios hombres. En el año 1998, la Junta de Castilla y León comenzó a subvencionar esta iniciativa de la Concejalía de la que hoy es responsable la popular Ana Guada. El objetivo de este programa de Itinerarios para la reinserción laboral de personas con dificultades para acceder al mundo laboral o con ingresos insuficientes para vivir es atender a estas personas que tienen el IMI. Este programa social consiste en la donación por parte de la Junta de Castilla y León de un sueldo mínimo de 352,35 euros y máximo de 469,8 euros que se abona por un periodo mínimo de 6 meses y máximo de 3 años. En esta iniciativa del Ayuntamiento leonés participan cuatro técnicos entre los que se encuentran responsables de varias áreas para asegurar el control y mejorar la ayuda de todos los participantes de este plan. De este modo, trabajan con estas personas un equipo multidisciplinar formado por un psicólogo, una terapeuta ocupacional, una educadora social y una asesora jurídica, quienes ayudan a estas personas. Para acogerse a este plan, los participantes deben someterse a una entrevista por parte de estos técnicos quienes posteriormente realizan un informe como un proyecto personalizado e independiente para evaluar su situación. En el año 2004, se acogieron a este plan 585 personas de las que 103 consiguieron un contrato laboral, la mayoría en el sector servicios -especialmente en hostelería-, otros 238 participantes terminaron trabajando en el servicio doméstico -dato que confirma la alta participación de mujeres en este programa- y otras 145 personas se beneficiaron de una acción formativa vinculada a este programa. La mayoría de estas personas provienen de familias desestructuradas, monoparentales o con serios problemas para encontrar un trabajo. Este programa realiza una labor preventiva y facilita la inserrción laboral. La concejala de Bienestar Social calificó los resultado de positivos y aseguró que es un programa necesario para aquellas personas que se acogen a él.