Cernuda y su poesía, presentes en la boda
«Tú justificas mi existencia. Si no te conozco, no he vivido. Si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido». Así terminaba una de las invitadas a la boda la lectura del poema «Si el hombre pudiera decir», del poeta sevillano Luis Cernuda. La emoción y los nervios la embargaban, pero no fue la única. A los novios también les traicionaron, ya que se dieron su primer beso de casados después del intercambio de alianzas, pero antes de recibir el consentimiento de Francisco Fernández quien, tras concedérselo, señaló sonriendo «ya podéis besaros por segunda vez». Pero esta no fue la única anécdota de esta primera boda homosexual en León. Los novios cumplieron su promesa de llevar algo colorido en su traje, como recuerdo al distintivo de la comunidad gay, la bandera arco iris. Pero, sin duda, el color más llamativo lo tuvo el ramo en el que estaban colocados los anillos y el confeti que, junto a los pétalos de rosa, dieron la bienvenida al nuevo matrimonio a la salida del antiguo Consistorio, donde decenas de personas les esperaban para felicitarles y participar en este acontecimiento de relevancia histórica para toda la provincia.