El menor coste se debe a que los salarios son más bajos que en el conjunto del país
Un trabajador leonés cuesta 1.844 euros menos al año que la media
Cada empleado destina 158 euros anuales a seguros para mejorar sus prestaciones
Las partidas destinadas a la formación profesional o las retribuciones sociales son minoritarias
Un trabajador leonés tiene un coste laboral bruto de 23.215 euros al año, lo que implica 1.844 euros menos que la media del país. Esta diferencia se debe fundamentalmente a que los salarios son más reducidos, en concrto se establecen en una media anual de 16.767 euros, es decir, 1.514 euros menos que la media nacional. Del coste laboral total de cada trabajador leonés corresponden 5.499 euros a las cotizaciones obligatorias, apenas 218 euros menos que la media nacional; mientras que la aportación de los empleados de la provincia a instituciones privadas de seguros sociales u otras entidades de seguros para mejorar y complementar las prestaciones del sistema de la Seguridad Sociales queda fijado en 158 euros anuales (de media entre todos los trabajadores), según las cifras hechas públicas por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los datos oficiales revelan también que el coste laboral de los empleados leoneses destina 246 euros anuales a las prestaciones sociales directas, y otros 200 euros a subvenciones y deducciones. El coste neto por trabajador se sitúa, así en poco más de 23.000 euros al año, frente a los 24.838 euros de media en el conjunto del país. Según las estadísticas oficiales, entre los salarios y las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social se llevan casi el 96% del coste laboral total por trabajador. En cuanto a las prestaciones sociales directas, aquellos pagos que la empresa abona directamente al trabajador o su familia por determinadas subvenciones, son apenas un 1% del coste laboral neto. Por lo que se refiere a las indemnizaciones por despido, calculadas por el coste entre todos los trabajadores, no sólo entre los despedidos, representaron un 0,67% del montante total que cuestan los trabajadores. Más reducidas son aún las partidas destinadas a formación profesional, donde el gasto se redujo a apenas un 0,34% del coste total; mientras que los gastos de carácter social fueron de apenas 32 euros por trabajador y año. En este apartado se incluyen retribuciones en forma de gastos de comedores, guarderías, actividades culturales, etc.