El santuario recibió más de 250.000 visitas en el aniversario de la Virgen

La Virgen del Camino sigue despertando una gran devoción dentro y fuera de las fronteras leonesas. Así, al menos, lo avalan las cifras, ya que el Santuario ha recibido más de 250.000 visitas durante el año jubilar, que se inició el 5 de octubre del 2004 y se clausuró el pasado domingo. El prior de los dominicos, Miguel Ángel del Río, considera que la participación del público en los actos culturales, religiosos y festivos que se han organizado durante esos doce meses ha superado las expectativas. Es más, entiende que la Virgen suscita un gran respeto entre la población, que se ha volcado en el quinto centenario de la aparición a un pastor de Velilla de la Reina. La patrona leonesa ha sido homenajeada por funcionarios de prisiones, políticos, enfermos, minusválidos, sacerdotes, monjas y feligreses de las diócesis, particulares y hasta por los miembros de la Cultural. Los autocares con parroquianos de León y de otras provincias limítrofes han marcado el calendario de visitas casi semanalmente. Fruto del 500 aniversario de la aparición, los dos ayuntamientos del Voto (Valdefresno y Villaturiel) publicaron un libro sobre la hermandad de la Sobarriba, los dominicos editaron un DVD con la historia y se realizaron varias medallas conmemorativas. Además de las conferencias, las exposiciones y los conciertos, el Ayuntamiento de Valverde nombró alcaldesa permanente a la Virgen del Camino y le entregó simbólicamente un bastón de mando valorado en 2.000 euros. Inversiones «La verdad -reconoce el prior- es que ha sido un año agotador, pero muy satisfactorio». De la misma opinión es el alcalde, David Fernández, quien destaca que la loclaidad «ha estado en la primera línea de las actividades culturales, religiosas y populares», lo que ha repercutido favorablemente en la difusión de La Virgen del Camino y en la hostelería del pueblo. Ante la avalancha de público que preveían para el año jubilar tanto el Ayuntamiento como los dominicos realizaron algunas obras. En el Santuario se arreglaron las tres campanas, con 300.000 euros, en el entorno del Humilladero se invirtieron 60.000 euros y otra cifra similar en el programa de actos municipales.